Automoción

El sector automovilístico se aferra al Plan PIVE tras un el hundimiento de las ventas

El ministro de Industria, Jose Manuel Soria, asegura que este el Plan de Incentivos al vehículo Eficiente del Gobierno reactivará el mercado del automóvil.

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EFE

Durante el mes de septiembre, las matriculaciones de automóviles cayeron un 36,8% con respecto al mismo período del mes anterior. Ante este nuevo y fuerte retroceso, el sector automovilístico se ha aferrado al nuevo Plan PIVE de ayudas a la compra de coches, del que el ministro de Industria, José Manuel Soria, ha asegurado que reactivará el mercado del motor español. 


El dato de matriculaciones se situó en 35.146 unidades durante septiembre, lo que supone una fuerte caída del 36,8% respecto a las 55.572 unidades comercializadas en el mismo período de 2011, según las asociaciones de fabricantes (Anfac) y vendedores (Ganvam).


Es más, bajaron las ventas de coches en todos los segmentos y en todas las comunidades autónomas. El 72,7% de los coches comercializados ese mes eran diesel, frente a una cuota del 25,1% para la gasolina y del 2,2% para eléctricos e híbridos.


En los nueve primeros meses del año, las ventas de turismos y todoterrenos se situaron en 555.362 unidades, lo que se traduce en una reducción del 11% en comparación con el mismo período de 2011.


Las matriculaciones de septiembre se conocen coincidiendo con la entrada en vigor del Plan PIVE (Plan de Incentivos al vehículo Eficiente) de ayudas a la compra de coches, que, según Anfac y Ganvam, permitirá al Estado recaudar tres euros por cada euro invertido. El programa cuenta con 75 millones de euros de presupuesto.


Además, las dos organizaciones esperan que el PIVE mejore las cifras del mercado que, de seguir su tendencia actual cerraría 2012 muy por debajo de las 700.000 unidades. En este sentido, recuerdan que el 65% de los turismos que se venden en España se pueden acoger al Plan.


De hecho, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha defendido que el PIVE va a "ayudar" a reactivar la actividad económica en el subsector del automóvil y aumentará la recaudación por ingresos tributarios.


En declaraciones a los periodistas tras realizar una visita a la refinería de Cepsa en Santa Cruz de Tenerife, ha recordado que el objetivo de este programa es retirar del mercado los vehículos "ineficientes" por su emisión de dióxido de carbono y alto consumo de combustible, de entre 10 y 12 años.


Ante la caída de las ventas en septiembre, Soria confía en que el plan PIVE sirva de revulsivo para un subsector económico que aporta el 10% del PIB del país, y ha puesto como ejemplo que el pasado fin de semana se ha "reactivado" el mercado publicitario con multitud de ofertas.


Soria ha destacado que por cada euro de inversión pública retornarán 2,5 vía ingresos a la Administración y ha resaltado que los 75 millones del presupuesto no provienen del Ministerio sino del Instituto para la Diversificación y el Ahorro de Energía (IDEA).


El presidente de la Asociación de Vendedores de Vehículos a Motor (Ganvam), Juan Antonio Sánchez Torres, expresó su confianza en que el Plan PIVE propicie la recuperación del mercado y aminore el impacto de la crisis sobre las redes de distribución.


Según Ganvam un total de nueve millones de vehículos que circulan por las carreteras españolas, pueden acogerse al Plan PIVE. En concreto, más del 36% de los turismos y el 41% de los comerciales son susceptibles de acogerse a este plan por superar esta antigüedad.


La asociación está convencida de que el Plan PIVE, que contempla ayudas directas de 2.000 euros por la compra de un coche a cambio de la entrega de uno de más de doce años o de diez, en el caso de los comerciales, permitirá frenar el envejecimiento del parque.


Sánchez Torres ha visto el plan como "elemento dinamizador del empleo", ya que permitirá atemperar la pérdida de tejido empresarial dentro de la red de distribución, donde para 2012 estaba previsto el cierre de 500 empresas y la desaparición de 3.000 puestos de trabajo.


Según Sánchez Torres, "con este plan se cumple una vieja aspiración del sector del automóvil que siempre ha defendido la eficacia de este tipo de fórmulas para insuflar confianza y estimular una demanda lastrada por la incertidumbre económica y la falta de financiación".


Por otro lado, recuerda que este plan de estímulo tendrá un impacto positivo sobre las arcas públicas ya que generará unos ingresos adicionales vía impuestos, sobre todo por IVA, que contribuirán a cumplir con los objetivos de déficit.


Por su parte, el director de Comunicación de la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), David Barrientos, ha calificado de "decepcionantes" los datos de septiembre, pero aseguró que el consumidor está en el mejor momento para adquirir un coche, pues a las ofertas comerciales de fabricantes se suma el Plan PIVE.


EL PLAN PIVE GENERAR UNA DEMANDA ADICIONAL DE 50.000 COCHES


El PIVE generará una demanda añadida de hasta 50.000 unidades hasta fin de año, según cálculos de la consultora MSI para la Federación de Asociaciones de Concesionarios de la Automoción (Faconauto).


En concreto, estima en unos 40.000 los compradores que no tenían pensado cambiar de vehículo, pero que lo harán "impulsados" por la ayuda de 2.000 euros por coche del plan. Demanda que calcula alcanzará las 50.000 unidades "si su difusión e impacto son los esperados por el sector".


La patronal asegura que este "impulso a la demanda" tendrá "consecuencias muy positivas" para las redes de concesionarios, "sin duda los más golpeados por la crisis que afecta a la automoción".


"El Plan PIVE nos va a dar aire y llega justo a tiempo, especialmente para los concesionarios de algunas marcas, que lo estaban pasando realmente mal y que se encontraban al límite", indicó el presidente de Faconauto, Antonio Romero-Haupold.


La patronal de concesionarios asegura que en los meses que restan hasta fin de año los compradores se encontrarán en los concesionarios "las mejores condiciones de la historia para cambiar su vehículo".


A raíz de la entrada en vigor del Plan PIVE, la Asociación nacional de Importadores de Automóviles (Aniacam) ha revisado al alza su previsión de ventas de coches para este año, de 700.000 a 720.000 unidades.


El presidente de Aniacam, Germán López Madrid, cree que el PIVE es una gran noticia para detener el envejecimiento del parque automovilístico, y además beneficiará al Estado, que aumentará su recaudación en 200 millones por los impuestos sobre los vehículos adicionales.


"La media de ventas de los concesionarios durante el mes de septiembre se sitúa en cuatro ó cinco coches, es decir, un coche por semana. Sin embargo, es seguro que hay concesionarios que no han vendido ni un sólo coche", expuso López Madrid.


Para el máximo responsable de Aniacam, esta situación "ahonda aún más las dificultades que están teniendo muchos concesionarios para sobrevivir", junto con la baja facturación y la disminución de entradas en taller.