CAI ZARAGOZA

Un líder necesario

Andrés Miso volvió a ser el de la pretemporada. Ante la ausencia de Cabezas, el madrileño asumió la responsabilidad ofensiva y no sólo anotó sino que asistió a sus compañeros. Se le echaba de menos.

Andrés Miso defiende durante un encuentro
Un líder necesario
EFE

Ya en la pretemporada quedó muy claro que Andrés Miso es un ganador nato, un líder en la cancha, un hombre experimentado que sabe qué hacer en cada momento y que asume la responsabilidad sin que le tiemble el pulso. Sin embargo, con el arranque de la campaña, la llegada de Carlos Cabezas, y la predilección de los técnicos por el australiano Barlow, sus minutos fueron decreciendo y su confianza fue para abajo. La calidad se le conoce y necesitaba dar un paso adelante. Tras ser castigado en Alicante reaccionó con un buen partido el miércoles frente al Lagun Aro, y ayer lo bordó ante el DKV Joventut. Se convirtió en el líder que necesitaba el CAI. Ante la ausencia de Cabezas, el equipo echaba en falta alguien que asumiera la responsabilidad y Miso lo hizo. Abós le dio sus minutos (27) y el rojillo no defraudó. Volvió a ser el de la pretemporada, se echó el equipo a la espalda y abanderó las ofensivas aragonesas. Pero no sólo con sus puntos sino con brillantes asistencias a los pivots. La pena es que su gran actuación no se viera refrendada con un triunfo. Aún así, el camino es ese, el que marca un líder al que se necesitaba.

Desde luego, no se le podía haber olvidado jugar al baloncesto. Su pasado y sus números le avalaban, pero a Miso le faltaba hacer un gran partido vestido de rojillo. Ayer lo completó, justo el día en que se echaba de menos a una cabeza visible en la cancha. Desde el primer día el madrileño ha mostrado que es un peso pesado en el vestuario. Su presencia junto a DP y los titulares antes de comenzar cualquier duelo lo confirman.

Pero faltaba una cita en la que llevara la voz cantante. Con las bajas el escolta tuvo su gran oportunidad y no la dejó escapar. En sus 27 minutos se fue hasta los 19 puntos, dos rebotes, una recuperación y cinco faltas recibidas, para 26 de valoración. Aunque lo mejor se lo guardaba para sus compañeros, puesto que sus ocho pases de canasta le convirtieron en el máximo asistente de la jornada en la ACB.

"La verdad es que ha sido un buen partido en el plano individual y es una lástima que no haya servido para llevarnos la victoria. En lo personal tengo que seguir en esta línea, intentar con el paso de los partidos tener más confianza y ayudar a que el equipo vaya para arriba". Esas fueron sus primeras palabras tras un duelo en el que apareció el verdadero Miso.

Y su mejor versión manda sobre la cancha: "La baja de Carlos es un contratiempo importante y no sólo yo sino todos debemos dar un paso al frente. Este es el equipo que se hizo para afrontar toda la temporada y tenemos que dar el do de pecho, demostrar que somos gente válida, que tiene ganas de trabajar y hacer una buena temporada y que no se pasen apuros".

Su carácter ganador le hacía reprocharse lo ocurrido en la pista, ya que el CAI dejó escapar un partido asequible. "Nos ha faltado el ponernos a una canasta. Hemos llegado a estar a cuatro puntos, pero nos ha faltado ese poquito que nos hubiera dado más confianza y más ganas de creer en el partido. Ha sido una pena. Hay que seguir trabajando porque esta vez la defensa no ha sido la de los últimos partidos y tenemos una semana para corregir errores".

De hecho, Miso no se conforma y quiere más: "Si miramos el objetivo de la permanencia, las siete victorias que llevamos están bien, pero yo soy ambicioso y pienso que podíamos haber obtenido una o dos más. Quedan 17 partidos y el objetivo que nos tenemos que marcar es mejorar lo logrado en la primera vuelta".