El técnico del Inter de Milán, Jose Mourinho, anunció ayer su intención de "dirigir al Real Madrid", aunque explicó no saber cuándo tendrá esa oportunidad. "Si será el próximo año o después, no lo puedo decir; pero yo quiero entrenar al Real Madrid", confesó en una entrevista publicada ayer por el diario deportivo 'Marca'. Mourinho confirmó que, para la próxima temporada, únicamente maneja dos alternativas: continuar en su actual club o fichar por el conjunto blanco. "Mis únicas opciones son Madrid o Inter de Milán", dijo.

"Si finalmente me voy de Italia, lo haré con la conciencia tranquila después de haber cambiado el club. Estoy bien aquí, en el Inter, donde he pasado dos años increíbles. No me importaría seguir. Solo una oferta del Real Madrid me podría hacer cambiar de idea", confesó el técnico.

Además, Mourinho se defendió de los ataques que recibe por su propuesta futbolística; un ideario, según sus detractores, excesivamente conservador. "Mis equipos no sen defensivos. Marcan, juegan al fútbol, son agresivos y no tienen miedo a ningún rival. Son equipos competitivos", recordó.

Y como ejemplo, el portugués citó su triunfo en las semifinales de la Liga de Campeones ante el Barcelona. "El partido que hicimos en San Siro, donde anotamos tres goles, sorprendió al Barça. En dos años, nadie había sido capaz de golpear futbolísticamente a ese equipo -añadió-. El Inter ganó la eliminatoria en el partido de ida".

Mientras, Manuel Pellegrini sigue siendo técnico del Real Madrid. Y así seguirá, al menos, hasta la próxima semana. El club blanco postergó ayer la decisión ya tomada de su despido, a la espera de reunirse con Mourinho y acordar la contratación del portugués. Aunque la junta directiva del Real Madrid se reunió ayer, el anuncio sobre la llegada del nuevo técnico no será oficial hasta la próxima semana.

El principal candidato a la sucesión, ahora en el banquillo del Inter de Milán, sigue preparando la final de la Liga de Campeones del próximo sábado; y no se quiere oficializar su fichaje antes del partido. De momento, hay un principio de acuerdo, verbal pero no firmado, aunque todavía quedan muchas cuestiones por debatir: proyecto, años de contrato, atribuciones, fichajes, dinero disponible para invertir, bajas de futbolistas...