ASCENSO A 2ªB

La Muela abre la puerta de Segunda B al Zaragoza

El hipotético ascenso del equipo de Emilio Larraz a la categoría de bronce solucionaría el problema del estancamiento de los canteranos zaragocistas en la Tercera División.

Fonsi celebra jubiloso el gol de la clasificación ante el Constancia de Inca.
La Muela abre la puerta de Segunda B al Zaragoza
TONI GALáN/A PHOTO AGENCY

 La Muela está muy cerca de ascender a la Segunda B, pero carece de medios para sobrevivir en Segunda B. El Real Zaragoza B necesita competir en Segunda B para que sus promesas no se estanquen en el cementerio de la Tercera División aragonesa, pero no se ha ganado en el campo el derecho a competir en la Segunda B. Con estas dos premisas, la solución al silogismo parece evidente: La Muela y Real Zaragoza deben hablar para llegar a un acuerdo, una relación simbiótica que propiciaría que La Muela pueda jugar en Segunda B y que en ese mismo equipo puedan crecer los mejores valores que brotan de la Ciudad Deportiva. Hasta el momento no se ha formulado un planteamiento formal, esencialmente porque La Muela todavía debe superar una eliminatoria para consumar el ascenso a la categoría de bronce; pero la suposición, la certeza de que el acuerdo significa lo mejor para ambas partes, parece claro.


La Muela es un club relativamente joven. Refundado hace poco más de un lustro, comenzó a competir en Segunda Regional entrenado por Víctor Pinilla, hermano de la alcaldesa de la localidad y hombre de prestigio reconocido en el fútbol regional. Apoyado en Javier Blasco, director deportivo del club, la entidad cosechó éxito tras éxito, ascenso tras ascenso, con la frecuencia aproximada de un año. La Muela era el Real Madrid de la regional, catalizado en el extraordinario auge económico de la localidad. En un plisplás saltó el año pasado a la Tercera División, máxima categoría autonómica. Pinilla reunió un equipazo. Pero estalló la Operación Molinos y todo o casi todo se vino abajo.


Los problemas de La Muela no nacen de su equipo de fútbol, pero indiscutiblemente le afectan. Los respaldos económicos, articulados en muchos casos por la iniciativa de la alcaldesa, desaparecieron. La Muela salió a competir este año en la Tercera División con un presupuesto que no alcanza la tercera parte de lo destinado a gastos de plantilla en el pasado ejercicio. Sus mejores y más caros jugadores ficharon por otros clubes. Sin embargo, el rendimiento deportivo ha resultado sobresaliente. Víctor Pinilla se apartó un tanto de la gestión del grupo. La plantilla la confeccionaron Javier Blasco y el nuevo entrenador, Emilio Larraz, verdadero artífice del milagro de La Muela.


Ascenso inviable


El objetivo al inicio del curso residía en alcanzar la permanencia cuanto antes. Sin dinero, sin delanteros, sin casi nada, el equipo de Larraz empezó a ganar y a ganar. Exprimiendo el rendimiento de la plantilla, La Muela rozó el título liguero y ahora amenaza con ascender a Segunda B. La amenaza es seria, muy seria: aún no han perdido y solo han encajado un gol en toda la serie del ascenso. Si superan al Cerceda gallego, habrán consumado la gesta. El problema vendría después. Con su estructura actual, La Muela puede competir con dificultades en Tercera División. En este momento, las estrecheces son enormes. A la plantilla y al entrenador se les adeudan varias mensualidades. En Segunda B el presupuesto habría que multiplicarlo por cuatro. Es decir, con el planteamiento actual de club y los problemas que sufre la localidad, la presencia de La Muela por sí misma en Segunda B es inviable.


Pero el problema para La Muela puede ser la solución para el Real Zaragoza. El filial zaragocista volvió a fracasar en su intento de ascender a la Segunda B. La Tercera aragonesa no parece el terreno más fértil para que crezcan los mejores valores de la Ciudad Deportiva. Internacionales como Ramiro Mayor, Kevin Lacruz o Jorge Ortí no pueden mejorar en Tercera. La Segunda B ofrece unas condiciones de competitividad muy superiores para acelerar la progresión de estos talentos en caso de que no den el salto definitivo al primer equipo. Desde esta perspectiva, la 'adopción' de La Muela por el Zaragoza representaría un magnífico acuerdo para ambas partes. Queda claro que La Muela carece en estos momentos de medios para participar en Segunda B. Igual de claro que las joyas de la cantera aragonesa no brillan en el triste escaparate de la Tercera División aragonesa.