Fran Escribá analizó en rueda de prensa la derrota de su equipo en el primer partido en casa del nuevo proyecto. Sin puntos aún en juego, el equipo afina su preparación, con al aliciente extra de que ayer lo hacía ante su afición. Para el técnico del equipo aragonés, su equipo creó "muchas ocasiones" ante "un gran rival". "Tuvimos buen ritmo, ocasiones... era un partido para haber ganado con comodidad. La verdad es que estoy satisfecho, aunque me hubiera gustado ganar", dijo.

Escribá analizó su apuesta por el rombo en la primera parte, que mutó en un 4-4-2 más clásico en la segunda parte. "Queríamos buscar explotar el rombo con Maikel Mesa, para ver cómo nos asociábamos ahí... Estuvo bien, aunque con el 4-4-2 también nos fue bien. Sacamos conclusiones positivas". Esos dos sistemas son los que, a día de hoy, cuentan con más opciones para ser explotados por el míster en la temporada. "Son los dos que se ajustan más al potencial de la plantilla. Con el rombo pierdes profundidad por banda, tienes control y tienes llegada. Es un sistema que tendremos presente, que nos va a servir", señaló.

Escribá valoró el partido, y el primer gol, de Bakis: "Hoy queríamos darle 75 minutos, estoy muy contento porque ha hecho un partido estupendo. Ha generado ocasiones, estaba donde queremos que esté un delantero... Lo he visto cómodo en los dos sistemas".

Escribá también tuvo palabras para una afición "espectacular", que ha disfrutado, pese a la derrota, de un partido "bonito para el público", e incidió en la "ilusión que transmite el proyecto". Por último, se mostró "muy contento" por la llegada de Mollejo. "Lo conocemos futbolísticamente y el grado de compromiso, el ambiente que crea", dijo sobre el atacante, que será presentado este viernes con el Real Zaragoza.