Azón trabaja en el gimnasio y no jugará ante el Burgos por precaución

Iván Azón, en la mañana de este jueves, no se ha entrenado con el resto del equipo en la Ciudad Deportiva. Es síntoma evidente de que no jugará el domingo ante el Burgos en La Romareda (18.30), pues médicos y fisioterapeutas consideran que la contractura muscular que sufrió el delantero centro aragonés el pasado domingo en El Alcoraz de Huesca necesita un tiempo de recuperación que excede este fin de semana. 

Como la liga para el Real Zaragoza va a concluir en una zona clasificatoria escasa de riesgos y exigencias, no es cuestión de forzar a nadie en este tipo de dolencias leves. Otra cosa sería que algo grande estuviese en juego. Pero no se da el caso, así que Azón tiende a ver el partido ante los burgaleses desde la grada y esperará a ponerse a punto, sin prisas, para el siguiente partido, el sábado día 30, en el campo de Ipurúa de Eibar. 

Es un aviso serio el que emitió el músculo isquiotibial en la pierna derecha del zaragozano. Por fortuna, no hubo rotura, algo que sí se sospechó y temió al llevarse a cabo la sustitución de Azón en Huesca, por sus gestos y actitud ante la pedrada sentida en la zona posterior del muslo dañado. Así que, si todo va bien su vuelta es cosa de una semana más. 

Azón, con 6 goles, se ha convertido en apenas mes y medio en el mejor goleador de un equipo escaso en tantos durante todo el curso. Han sido goles de máxima utilidad (excepto el primero, en Leganés) que han servido para sumar los puntos clave que han sacado al Real Zaragoza de la zona de peligro en la que vivió durante siete meses, los primeros de la campaña. De ahí que su ausencia sea ahora un asunto de máxima relevancia. Frente al Burgos, será momento para Álvaro Giménez y Sabin Merino, los veteranos senior que han sido superados en rendimiento y carisma por el joven aragonés de 19 años.