Marc Gual será una de las novedades del Real Zaragoza en su partido del próximo domingo contra el Granada, una cita en la que la plantilla se muestra convencida de reaccionar y conseguir los tres puntos, aunque viviéndola con normalidad, sin calificarla de final o cargándola de una exceso de relevancia. El delantero badalonés se ha recuperado de su lesión y dejó este jueves en La Romareda muestras de ello. En un entrenamiento celebrado a puerta abierta, todos los ojos pudieron comprobar que Gual está con chispa. Marcó varios goles, alguno de ellos de bella factura, y destacó con sus movimientos ofensivos y su mirada a portería. Fue uno de los jugadores más aplaudidos por el público que se congregó en La Romareda, escaso en comparación con otros entrenamientos a puerta abierta que el Zaragoza, muy de vez en cuando, coincidiendo con alguna festividad, suele organizar en su estadio. Marc Gual declaró que se encuentra plenamente restablecido de su lesión muscular y en disposición de entrar en el equipo: “Estoy muy contento de trabajar con el grupo, con buenas sensaciones. Si Lucas quiere estoy en condiciones de dar el máximo contra el Granada”, aseguró.

Marc Gual analizó lo sucedido en los últimos partidos, con el equipo en caída libre. “No hemos tenido suerte, pero con el nuevo entrenador el grupo está confiado y sabemos lo que tenemos que hacer. Las cosas están muy claras”, indicó el delantero. Después de siete partidos sin ganar, el Zaragoza necesita hacerlo y Gual apuesta a que se le dará un giro a la dinámica: “Queremos darle a vuelta a la situación en el partido contra el Granada, aunque será un duelo complicado. Queremos volver a ganar en La Romareda. Hay que cambiar esto”.

El joven punta comentó los primeros pasos de Lucas Alcaraz: “Sabe lo que quiere, nos lo ha transmitido y sabemos lo que tenemos que hacer. Vamos a hacer lo que él pide. Sabemos que es un entrenador con mucha experiencia. Confía en nosotros y se la vamos a devolver”, señaló. “Hay diferencias con respecto al otro entrenador, pero ya veréis que tenemos confianza en él”, abundó Gual al término de la sesión de trabajo. 

Unas 300 personas, muchas de ellas niños, acudieron al entrenamiento de La Romareda, y a su conclusión los jugadores lanzaron balones a la grada como regalo, firmaron autógrafos y se fotografiaron con los hinchas.