Iñaki Urdangarin ha sido el espectador más ilustre del partido de balonmano que ha enfrentado este sábado al Bada Huesca y el Fraikin Granollers en el Palacio de los Deportes de Huesca. El motivo, la presencia de su hijo Pablo en las filas del conjunto catalán. De manera muy discreta, se ha situado junto a los pupitres de prensa y ha seguido como un aficionado más el desarrollo del encuentro. Por tanto, no ha ocupado una plaza en el palco de autoridades ni se le ha dispensado un tratamiento especial. Al final del choque, ha bajado a la pista y ha compartido unos minutos con su hijo, otros jugadores del Granollers y con el técnico del Bada, José Francisco Nolasco.

Urdangarin, exmarido de la infanta Cristina de Borbón y exjugador de balonmano, conoce bien los entresijos de este deporte y sigue muy de cerca los pasos de su hijo Pablo, el segundo de sus cuatro hijos, de 22 años y que ya se dedica de manera profesional a este deporte tras haberse formado en las filas del FC Barcelona. Curiosamente, su debut en la Liga Asobal se produjo en un encuentro ante el Bada Huesca al que asistieron sus padres y se disputó el 23 de octubre de 2021 en el Palau Blaugrana con triunfo de los anfitriones por 39-30.

Durante su carrera deportiva, que abarca desde 1986 al año 2000, compitió en la sección de balonmano del FC Barcelona, con el que ganó seis Copas de Europa y diez Ligas Asobal, además de obtener, con la selección española dos medallas de bronce en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 y Sidney 2000. Tras su retirada del ámbito deportivo, se centró en la actividad empresarial.

Contrajo matrimonio con la infanta Cristina de Borbón en 1997. En mayo de 2022 la pareja se separó. Tras una investigación por corrupción, fue condenado a más de cinco años de prisión por malversación, fraude, prevaricación, delitos fiscales y tráfico de influencias.