baloncesto
El Casademont Zaragoza tumba al gigante francés en otro partido memorable
El equipo aragonés se impone al Lyon, en el pabellón Siglo XXI (63-60), tras protagonizar otra actuación de altura, y da un paso de gigante hacia los cuartos de final de la Euroliga.
Fue un partido en el exilio, que acabó con otra actuación para el recuerdo. El Casademont Zaragoza es un equipo ejemplar, con una capacidad competitiva sobresaliente y una fe inquebrantable en sus posibilidades de triunfo. Y por ello superó este miércoles al Lyon (63-60), uno de los conjuntos más rutilantes de Europa, en un duelo que disputó en el pabellón Siglo XXI, y no en su escenario habitual, debido al espectáculo del Circo del Sol que se desarrolla estos días en el pabellón Príncipe Felipe.
Pese a estar condicionado por el destierro, el cuadro aragonés exhibió su versión más sólida y eficaz, volviendo a derribar todos los pronósticos para firmar otra victoria de altura, de rango mayor. Con el triunfo -el octavo en la Euroliga-, el equipo zaragozano fortalece sobremanera sus ambiciones de acceder a las siguiente ronda del torneo, un derecho al alcance de los cuatro primeros clasificados. De momento, el Casademont se alinea en la tercera posición de la tabla, aunque igualado con el DVTK húngaro, que es segundo.
El cuadro aragonés, muy seguro de su fuerzas, arrolló en los primeros compases de la contienda. Edificó atrás un muro sólido, resistente, sin apenas fisuras, que neutralizó las acometidas iniciales de su oponente. Y, además, se manejó en ataque con criterio y solvencia, generando grandes ventajas en el juego interior que aprovecharon Diallo, y después Atkinson en dos ocasiones, para capturar una renta de seis puntos (6-0) a los tres minutos de juego.
Aunque reaccionó el Lyon con un parcial de 5-0, el Casademont no se descompuso. Al contrario, se sobrepuso con prontitud, sostenido por su vehemencia defensiva, y estiró su ventaja con una convicción formidable. Después de un certero triple de Leo Fiebich, el entrenador de las visitantes, David Gautier, tuvo que detener el encuentro (15-5).
Tras las instrucciones de su técnico, el cuadro francés elevó sus prestaciones. Y redujo la distancia, en apenas 90 segundos, con seis tantos consecutivos que conllevaron el tiempo muerto de Carlos Cantero (15-11). A partir de ahí, el equipo local volvió a emplearse con acierto y tesón en defensa, y, con las canastas de Holesinska y Gervasini, pudo clausurar con una ventaja de cinco puntos el acto inaugural (19-14).
Posteriormente, las zaragozanas golpearon desde el triple, con un lanzamiento de Holesinska, pero las galas enseguida recuperaron el pulso. Lo hicieron con dos tiros libres de Fauthoux, primero, y luego con las acciones de Chery y Allemand, para situarse a un solo punto de distancia (23-22). La respuesta del Casademont fue tan rápida como contundente: convirtió tres triples de manera consecutiva -dos de Vega Gimeno y otro de Holesinska-, que precipitaron un nuevo tiempo muerto de David Gautier (32-24), al cuarto de hora de partido.
Pero nada modificó el escenario. El Casademont se mantuvo sólido atrás, sin desatenciones, además de atacar con determinación e inteligencia las debilidades defensivas de su rival. Un despliegue sobresaliente que, al margen de levantar al público de sus asientos, incrementó la renta de las locales hasta los 15 tantos (41-26), a los 17 minutos de juego.
Fue Fauthoux, de nuevo desde la línea de personal, quien aportó algo de oxígeno al Lyon antes del intermedio. Insuficiente para doblegar al Casademont, que alcanzó el descanso con una importante ventaja en el marcador (47-33) y sensaciones muy positivas en los dos lados de la pista.
Desacierto
El Lyon, uno de los conjuntos más imponentes de Europa, no admite ni una sola concesión. En los primeros compases de la reanudación, fue superior en todos los órdenes del juego, especialmente en defensa, y rebajó la diferencia con un parcial de 0-6 (47-39). Fue un tramo infausto, improductivo, que redujo drásticamente la anotación de las zaragozanas -una sola canasta en 8 minutos-. Un desatino ofensivo que facilitó la reacción de las francesas (49-46). Ni siquiera entraban los lanzamientos desde la línea de personal. Sí acertaron después Atkinson y Vega Gimeno, con cuatro tiros libres que frenaron momentáneamente el intento de remontada de su rival. A la media hora, el partido estaba abierto (53-48).
En el tramo definitivo, el Casademont recuperó su fortaleza defensiva, y las francesas permanecieron cuatro minutos sin anotador. Y en ataque, el Casademont movió el balón con coherencia y criterio, hallando buenas situaciones de tiro en el juego interior; pero falló canastas fáciles, en ocasiones sin ninguna oposición, y no pudo edificar una sólida renta. Aunque Geldof, tras una asistencia de Atkinson, sí facturó dos nuevos puntos para las locales, el Lyon se situó a una sola canasta (55-53) cuando restaban cinco minutos para la conclusión.
De ahí hasta el final, del intercambio de golpes salió beneficiado el Casademont, que se agarró al talento de Fiebich para acabar sumando la victoria y, de esta forma, seguir haciendo historia en la máxima competición continental. La alemana convirtió seis puntos consecutivos en los instantes más comprometidos, y finalizó el duelo con dobles dígitos en anotación (12), rebotes (12) y nota general (23). Fue otro partido memorable de un equipo histórico. Los cuartos de final quedan ya a escasos centímetros de distancia.
