El CAI podría sellar hoy, en la pista del Reggio Emilia italiano (20.30, Aragón TV HD), su clasificación matemática para la segunda fase de la Eurocup. Después de un inicio irregular, con importantes altibajos, con evidentes desequilibrios en su juego, el cuadro aragonés ha experimentado un notable crecimiento con el discurrir de la temporada. Ahora es un bloque mucho más fiable, mucho más estructurado, mucho más cuajado y seguro de sus fuerzas. Y ha rectificado su trayectoria en sus compromisos más recientes, en la Liga Endesa y en la competición continental, para avanzar con paso firme hacia sus dos objetivos más inmediatos: su acceso a la siguiente ronda europea y su participación en la próxima edición de la Copa del Rey. El primer reto, su continuidad en la Eurocup, se presenta a escasos centímetros de distancia. De hecho, podría consumar hoy mismo su propósito, siempre y cuando sume la victoria ante el Reggio Emilia y, al mismo tiempo, el Telekom Bonn doble la rodilla frente al Paris Levallois. Si se producen estos dos condicionantes, el CAI garantizará su presencia en la segunda fase, ya de forma matemática, a falta de una jornada para que finalice la primera ronda del torneo. En caso contrario, tendrá una nueva oportunidad el próximo miércoles, en el pabellón Príncipe Felipe, frente al Brose Bamberg alemán.

En la actualidad, el cuadro de Ruiz Lorente suma tres victorias continentales, todas ellas al abrigo de sus aficionados. Se impuso por la mínima al Paris Levallois (77-76), en la jornada inaugural, y posteriormente superó con solvencia al Reggio Emilia (93-79) y el Telekom Bonn (90-75), en dos de sus mejores actuaciones de la presente campaña. Sin embargo, al conjunto aragonés le ha faltado instinto criminal en sus desplazamientos. Su incapacidad para cerrar los partidos, que se acentúa en sus compromisos europeos, le ha obligado a un desgaste superior en los compases finales. Y, lo que es peor, le ha condenado a la derrota en todas las ocasiones. El CAI perdió en Estrasburgo, Bonn y París sobre la bocina, en la última acción del choque, lastrando drásticamente su recorrido en el torneo continental. Al menos, fue capaz de sobreponerse después y, tras imponerse en la anterior jornada al Telekom Bonn, sigue dependiendo de sí mismo para alcanzar su propósito. Su única derrota concluyente se produjo en Alemania, frente al Brose Bamberg (90-74). En el resto de sus actuaciones, al margen del resultado final, el conjunto zaragozano ha guardo ambiciones de triunfo hasta el último segundo.

A este aspecto, a su capacidad competitiva, se agarra el cuadro zaragozano para intentar atrapar la victoria frente al Reggio Emilia. El cuadro de Massimiliano Menetti, con apenas dos triunfos en Europa, se halla incrustado en la última posición. Todas sus opciones de acceder a la siguiente fase, ya muy reducidas, pasan por ganar hoy al CAI Zaragoza. Por ello, los aragoneses no esperan un partido plácido en Bolonia, y menos aún contra un oponente de enjundia, con numerosos recursos en todas sus líneas y cuyo verdadero potencial no es, ni mucho menos, el que delata la clasificación actual.

El conjunto italiano, campeón de la Eurochallenge, supone una importante amenaza desde el perímetro, donde cuenta con francotiradores de reconocido prestigio. Además, ya puede contar con Drake Diener, su hombre más peligroso, quien no actuó en las cinco primeras jornadas por lesión. El escolta fue elegido mejor jugador de la Lega en la pasada edición, tras promediar 18.9 puntos por partido, y con unos porcentajes de acierto muy elevados: un 50% desde el triple, un 60,1% en los tiros de dos, y un 86% desde la línea de personal. Es un jugador desequilibrante, muy rápido en sus acciones, con capacidad para el desborde individual y las penetraciones. Se trata de la referencia más fiable de los italianos en el capítulo ofensivo.

En su plantilla, el Reggio Emilia cuenta con otros valores muy estimables. Por ejemplo Federico Mussini, un jugador muy fiable desde el triple, o el internacional Andrea Cinciarini y Amedeo Della Valle (11), quienes también anotan con suma facilidad. Otro jugador importante es Achille Polonara, con muy buena mano en la larga distancia (12.8 puntos por choque) y que se prodiga también en la faceta reboteadora (7 capturas), aunque presenta grandes intermitencias en su juego. Es precisamente ahí, en la pintura, donde el CAI debe ejercer una manifiesta superioridad. Katic y Jelovac, siempre muy incisivos, cuentan con muchos más argumentos que los jugadores interiores del Reggio Emilia.