Una semana capital

El calendario no ofrece ni una sola concesión. Justo después de haberse enfrentado con el Valencia Basket, al CAI le sobreviene una semana capital en sus aspiraciones, tanto en la Liga Endesa como en la competición continental. En Europa se medirá mañana con el Dinamo Sassari (20.30), actual campeón de la Liga italiana, con la necesidad de conquistar la victoria para no comprometer sus opciones de acceder a los octavos de final.

Y en el torneo doméstico jugará ante el Fuenlabrada, el próximo domingo (12.30), en el duelo que cerrará la primera vuelta del campeonato. Dos partidos decisivos, de una exigencia considerable, que marcarán –ya de manera definitiva– el devenir de los zaragozanos en el curso actual. Al menos, el conjunto de Andreu Casadevall afrontará los dos compromisos al calor de sus aficionados.

La primera cita atiende a la Eurocup, donde los aragoneses se han propuesto alcanzar las eliminatorias directas por vez primera en su historia. En sus dos participaciones anteriores, el CAI quedó apeado de la segunda ronda del torneo, una fase que ya ha consumido sus dos primeras jornadas en la presente edición.

En el partido inaugural, el cuadro zaragozano no alcanzó la altura requerida para competir en su visita a Estambul, frente al Galatasaray, y fue permanentemente superado en todos los aspectos del juego (103-68). Sin embargo, el CAI rectificó su trayectoria en la segunda jornada, y lo hizo con una amplia victoria frente al Szolnoki Olaj, en el pabellón Príncipe Felipe, tras completar una de sus mejores actuaciones de la temporada.

De momento, la igualdad es máxima en el Grupo N, con los cuatro equipos empatados a una victoria. Y sólo los dos primeros clasificados accederán a los octavos de final. A falta de cuatro jornadas para el término de Last-32, el CAI se jugará gran parte de sus opciones ante el Dinamo Sassari, el rival que comparece mañana en la capital aragonesa.

Son los dos conjuntos que, a priori, optarán decididamente a la segunda plaza del grupo. Sobre todo porque el Galatasaray –por historia, presupuesto y amplitud de plantilla–, parece destinado a ocupar el liderato sin excesiva oposición. El CAI, por ello, encara el duelo contra los italianos con un doble propósito: además de adjudicarse la victoria, la intención es hacerlo por el mayor número de puntos posible para, en caso de empate en la última jornada, tener favorable el ‘basketaverage’ particular.

Mitchell, refuerzo del Sassari

En cualquier caso, la empresa presentará numerosos obstáculos. El Dinamo Sassari, vigente campeón de la Liga italiana, se ha incorporado a la competición desde la Euroliga, y cuenta en su plantilla con jugadores de renombre internacional. Por ejemplo Jarvis Varnado, que ha actuado en la NBA, además de conocidos como David Logan, Marquez Haynes, Rok Stipcevic o Christian Eyenga. Y hace 15 días se reforzó con Tony Mitchell, designado mejor jugador de la Liga transalpina en la anterior temporada. El alero representa una amenaza considerable desde el perímetro.

Comenzó la actual temporada en Rusia, en las filas del Krasnky Oktyabr, y en los dos primeros meses fue el máximo anotador de la Eurocup (27,5 puntos por duelo). Después firmó con el Estudiantes, donde sólo actuó durante seis partidos de la Liga ACB. Durante ese periodo, Mitchell facturó 9,2 tantos y 3.7 capturas por encuentro. El Dinamo Sassari es un bloque irregular, con importantes altibajos en su juego –es séptimo en la competición italiana–, aunque con recursos suficientes para cuestionarle el triunfo al conjunto aragonés. De hecho, en la anterior jornada de la Eurocup ya sorprendió al Galatasaray turco, un sólido aspirante al título europeo.

Mientras, en la Liga Endesa, el CAI está rindiendo muy por debajo de las expectativas generadas. De hecho, se halla instalado en la decimoquinta posición, tras haber ganado 5 de sus 16 compromisos. Y sólo dos triunfos le separan en la actualidad de los puestos de descenso a la Liga LEB Oro. El conjunto zaragozano inició el curso con dudas, con evidentes desequilibrios en su juego y con la mayoría de sus jugadores muy alejados de su verdadera dimensión.

Además, se topó en las primeras jornadas con algunos de los rivales más imponentes del campeonato, lo que acentuó su desconfianza. Un periodo inquietante, especialmente adverso, que tuvo consecuencias drásticas el pasado mes de noviembre con la destitución del entrenador. Andreu Casadevall sustituyó en el banquillo a Joaquín Ruiz Lorente; pero la reacción no ha sido tan inmediata como para optar a la Copa del Rey. Ahora, para aspirar al ‘play off’ al término de la temporada, es obligatorio superar al Fuenlabrada el próximo domingo.