Cómo hacer frente a los problemas de baja visión

Cómo hacer frente a los problemas de baja visión

Degeneración macular asociada a la edad, retinopatía diabética, glaucoma, retinosis pigmentarias o miopía magna son algunas de las enfermedades que provocan pérdida de visión.

De izquierda a derecha: microscopio con flexo especial para pacientes con baja visión; gafas telemicroscopio, que amplían el campo visual, ayuda a enfocar y mejora la profundidad visual; y una ayuda electrónica con variación de aumentos, que puede facilitar la lectura.
De izquierda a derecha: microscopio con flexo especial para pacientes con baja visión; gafas telemicroscopio, que amplían el campo visual, ayuda a enfocar y mejora la profundidad visual; y una ayuda electrónica con variación de aumentos, que puede facilit
Yanguas Ópticos

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en 2020 se duplicarán los casos de problemas de baja visión, es decir, aumentarán las personas cuya agudeza visual en el mejor de los ojos es menor o igual al 30% o cuyo campo visual es inferior a 20 grados.  Patologías como la degeneración macular, la retinopatía diabética, el glaucoma, las cataratas no operable, la retinosis pigmentaria o la miopía magna están detrás de la baja visión, cuyos afectados no mejoran ni con la graduación en gafa ni con tratamientos médicos, farmacológicos o quirúrgicos.

La falta de tratamiento provoca no solo una pérdida de visión (tanto en el campo central como en la periferia), sino una disminución de la calidad de vida, "pues conlleva una pérdida de movilidad e incapacidad para realizar tareas cotidianas", apuntan desde Yanguas Ópticos, donde cuentan con un servicio especializado en baja visión,en el que un equipo de optometristas especializados en esta área evalúa cada caso para encontrar la mejor ayuda, tanto óptica como electrónica, que mejora la visión y calidad de vida de los pacientes afectados por esta patología.

Caso de éxito

Para dar buena cuenta de la especialización y el éxito de estos tratamientos, una vez realizado el diagnóstico del oftalmólogo, desde Yanguas Ópticos explican el caso de José Luis, un paciente con degeneración macular asociada a la edad, que a pesar de controlar la enfermedad y conseguir que no haya avanzado más, no veía bien con ningún tipo de gafa, ni siquiera las progresivas. "Debido a esta patología, el paciente no podía ver las caras de las personas ni leer con facilidad, pero sí podía caminar sin tropezarse, ya que la DMAE no afectaba a su visión periférica, -relatan desde esta óptica-. Se le explicó que evaluando su visión, intentaríamos magnificar el tamaño de las letras y realizar un proceso de rehabilitación visual para que pudiese leer de nuevo".

Al paciente también le molestaba la luz al salir a la calle. "Las patologías oculares influyen en el paso de la luz: cuando entra menos de lo habitual en el ojo, hay una reducción de agudeza visual y de contraste y una desaturación de los colores, lo que provoca el deslumbrambiento". Tras realizarle una prueba de filtros selectivos, con los que se controla la cantidad de luz que entra en el ojo, aumentando de una forma eficaz el contraste y la resolución, "le realizamos una montura que no deja pasar la luz, ni frontal ni lateral, a la que el paciente respondió de manera satisfactoria", concluyen.