Ha sido el último intento de que el pueblo español se identifique plenamente con la Casa Real: ¿hay algo más personal que el número del DNI? A partir de ahora todos embarullados. Cualquiera podrá utilizar el número del Rey, el Príncipe, etc. La igualdad ante la ley ha sido superada por ¡la identidad! Ya somos uno, un único DNI. Todos unidos y confundidos en una gran nación, incluidos catalanes, vascos y familia regia. Cualquiera es usted y viceversa. ¿Y si le confunden con Blesa? ¿O con Bárcenas? Ah, se siente. (A lo mejor le corresponde -aleatoriamente- una cuenta en Suiza).

La idea era buena, solo que se han hecho un lío.

Los servicios de espionaje de la NSA lo van a tener difícil para descifrar quién es quién y qué ha comprado o vendido. Orwell no contaba con la capacidad de embarullarlo todo de la inteligencia española.