Una persona muere en un accidente de tráfico en la A-221, entre Caspe y Maella
El fallecido es el conductor de un turismo que ha colisionado contra un camión.
Un hombre perdió la vida este jueves en Caspe al chocar el turismo que conducía contra un camión cargado de hierro en la A-221. El accidente se produjo sobre las 14.30 a la altura del punto kilométrico 65,500, donde el coche impactó contra el frontal derecho del tráiler. Aunque después recibió asistencia sanitaria, el transportista pudo abandonar la cabina por su propio pie. Peor suerte corrió el conductor y único ocupante del segundo vehículo, que quedó atrapado entre lo hierros de la carrocería y los Bomberos de la Diputación de Zaragoza solo pudieron rescatar después su cadáver.
La Guardia Civil de Tráfico ha abierto una investigación para aclarar las causas de la violenta colisión, que hizo que el turismo saliera despedido a la cuneta de la margen derecha. La fatalidad ha querido que los dos últimos accidentes mortales registrados en la provincia de Zaragoza tengan como escenario la A-221, carretera que une las localidades de Quinto con Maella. De hecho, las dos colisiones se produjeron con apenas 22 horas de diferencia y a solo doce kilómetros de distancia. En la primera, la víctima fue un hombre de 34 años cuyos todoterreno se salió por al margen derecho de la vía y terminó volcando. El conductor salió despedido del vehículo y sufrió un fuerte golpe en la cabeza. Y aunque los sanitarios trataron de reanimarlo, sus lesiones eran tan importantes que no pudieron salvarle la vida.
Ese mismo miércoles por la mañana se produjo la muerte de otro conductor de 47 años. Por causas que también se investigan, el hombre perdió el control de su turismo y se salió de la carretera A-122 a su paso por Oitura, pedanía del municipio de Bárboles, en la comarca de la Ribera Alta. El Audi A-3 en el que se desplazaba impactó contra un talud, pero como la víctima conservaba la constantes vitales, llegó a movilizarse el helicóptero del 112. Por desgracia, sus heridas eran también muy graves y tampoco sobrevivió.
Estos tres siniestros mortales se suman al que se produjo el pasado 4 de enero en Osera de Ebro, en el que perdieron la vida otras dos personas, lo que a estas altura de mes eleva el balance de fallecidos a cinco. De hecho, todos las muertes de este trágico inicio de año en la red viaria aragonesa se han producido en carreteras de la provincia de Zaragoza.
