El Ayuntamiento de Zaragoza ha activado el nivel amarillo del Plan Municipal de Emergencias ante las fuertes rachas de viento que se

esperan esta tarde en la capital aragonesa y que, según la Agencia Estatal de Meteorología, podrían alcanzar hasta 100 kilómetros por hora.

Ante esta situación, la concejal delegada de Bomberos y Protección Civil, Ruth Bravo, ha activado el plan de protección civil en nivel amarillo desde este jueves a las 15.00 hasta las 08.00 del viernes 3 de noviembre, según las previsiones. No obstante, si mañana la situación meteorológica no mejora, el Ayuntamiento valorará prorrogar la activación del plan el tiempo que sea necesario.

Por ello, tal y como figura en el plan de protección civil, el Ayuntamiento ha cerrado todos los parques de la ciudad como medida preventiva para garantizar la seguridad de los vecinos, teniendo en cuenta además que en los últimos días han caído precipitaciones y el terreno está húmedo, lo que entraña mayor riesgo de desprendimientos.

En este sentido, se recomienda a los ciudadanos evitar las zonas arboladas, como la ribera del Ebro y otras, así como respetar la señalización de los parques y no entrar en la zona precintada. 

Además, para garantizar la seguridad, el Ayuntamiento de Zaragoza ha desplegado también a los voluntarios de Protección Civil, quienes estarán presentes sobre todo en las zonas de más riego para aconsejar a la ciudadanía.

Por parte del Ayuntamiento, todos los servicios implicados, como Bomberos, Policía Local, Parques y Jardines o Infraestructuras, trabajan de manera coordinada para garantizar la seguridad en la ciudad, en el marco del plan municipal de emergencias. En este caso, acumulan años de experiencia y un operativo avanzado, ya que este tipo de emergencia es la más frecuente en la ciudad. 

En la tarde del jueves han sido 33 las salidas que ha tenido que hacer Bomberos de Zaragoza, la mayoría entre las 14.00 y las 16.00, y no se ha registrado ninguna incidencia grave. 

En estas situaciones, el Ayuntamiento aconseja seguir estas medidas de autoprotección:

• Cerrar y asegurar puertas, ventanas, balcones y toldos

• Retirar las macetas, jaulas y otros objetos para evitar su rotura y caída a la calle.

• Vigile que no haya en las fachadas elementos sin suficiente fijación: canalones, antenas, tejas, etc. Intente retirarlos o asegurarlos antes de la aparición del fuerte viento.

• Prevenga un sistema de iluminación alternativo ante posibles cortes de energía eléctrica. Disponga de una radio de pilas para mantenerse informado de la situación.

• No salir de casa durante el vendaval por el peligro de desprendimiento de cornisas y otros materiales. Alejarse de las ventanas o de objetos que puedan caerse.

• No protegerse del viento en zonas próximas a muros, tapias o árboles.

• Si el viento arrecia, buscar refugio en un portal o establecimiento público.

• En caso de advertir la presencia de cables de tendidos eléctricos caídos, no tocarlos y alejarse de ellos. Evitar también las alambradas y vías de ferrocarril.

• Se recomienda circular con la máxima precaución, con las luces de cruce encendidas, y prestar atención a los cambios de rasante.