El "arbolico de Juan Rayo" que pide agua y cuidados sobrevive desde hace 6 años

Un misterioso cartel que data de 2017 ha permitido sobrevivir estos años a un árbol en las proximidades de Zaragoza. 

Cartel colgado en "el arbolico de Juan Rayo", en el camino viejo de Torrecilla de Valmadrid, cerca de Zaragoza.
Cartel colgado en "el arbolico de Juan Rayo", en el camino viejo de Torrecilla de Valmadrid, cerca de Zaragoza.
Guillermo Mestre

Junto al camino viejo de Torrecilla de Valmadrid, en los secos y agrestes terrenos que hay justo detrás de Puerto Venecia, crece un árbol singular, que pide cuidados y agua, por favor, y que sorprende a los deportistas que recorren estos senderos, sobre todo ciclistas y corredores que se topan con él.

Un cartel colgado del árbol, todavía poco más que un arbusto, dice así: "Arbolico de Juan Rayo. Cuídemoslo. 19.08.2017". A sus pies, un banco en precario, a la espera de que el árbol dé más sombra, y otro cartel: "Agua, por favor", y un corazón.

Lo sorprendente es que, a pesar del tránsito de paseantes y deportistas, el árbol sigue creciendo desde 2017, como dice en el cartel. Así que el misterioso Juan Rayo, es de suponer, lo sigue cuidando con mimo, le da agua y hace que crezca, desde hace seis años, o que lo hagan las personas que pasan a su lado.

Así se consigue que el arbolico siga creciendo y sus ramas den cada día más sombra en el marco del estepario paisaje del entorno de Zaragoza. Esta historia rodeada de misterio levanta la curiosidad de quien observa el cartel, que se pregunta cómo ha podido sobrevivir el árbol en un entorno tan desértico casi seis años, y el interrogante que más curiosidad despierta: ¿Quién es Juan Rayo?  

"El arbolico de Juan Rayo", en el camino viejo de Torrecilla de Valmadrid, cerca de Zaragoza.
Cartel a los pies del "arbolico de Juan Rayo" 
Guillermo Mestre

A la primera pregunta responde una mirada al pasado: el usuario de Twitter Jesús Alba dejó este mensaje en la citada red social el 11 de abril de 2018: "Arbolico de Juan Rayo, cuidémoslo'. Muchos de los que, de vez en cuando bajamos de vuelta por aquí, lo regamos con el agua que nos ha quedado, menos un 'culín, por si las moscas". De esta misma mañana". Y acompaña el texto con una foto que muestra a un exhuberante arbolico de Juan Rayo, adornado con las hojas que le trajo esa primavera gracias a la lluvia y al riego de los amantes de la naturaleza. 

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