Rechazo unánime del pleno de Zaragoza a una moción de Vox que vinculaba inmigración y delincuencia
Diversos colectivos sociales y antirracistas defienden en el Ayuntamiento el papel de los inmigrantes en el desarrollo económico y social de la ciudad.
El Ayuntamiento de Zaragoza ha expresado este viernes su rotundo rechazo al racismo y la xenofobia. Todos los grupos municipales se han opuesto a una moción presentada por Vox en la que se trataba de vincular delincuencia e inmigración y que buscaba la colaboración del Consistorio para facilitar la expulsión de extranjeros sin permiso de residencia. Es más, el pleno ha lanzado un mensaje de bienvenida a los migrantes y se ha reconocido su papel en el desarrollo económico y social de la ciudad.
El debate se ha iniciado con la emoción de las palabras de los inmigrantes presentes en la sala, que con pancartas con el lema “ninguna persona es ilegal” han considerado que la moción de Vox “está cargada de odio”. Así lo ha dicho Arlín Ramón Araujo, de la asociación Senderos de Justicia, que ha opinado que la propuesta de la extrema derecha “no respeta los valores constitucionales ni la declaración de derechos humanos”. “Es una moción que discrimina y divide. Es un retroceso en materia de derechos civiles”, ha dicho. Idrissa Gueye, de la asociación Ilumina Senegal, ha afirmado que Zaragoza es “una ciudad de acogida” y tachó de “racista” la propuesta de Vox.
¿Qué dice la moción de Vox? El preámbulo relaciona la llegada de inmigración irregular con el aumento de delitos, y se refiere expresamente a los de naturaleza sexual. Además de solicitar más medios humanos y materiales a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad, exige que el Ayuntamiento facilite datos del padrón para propiciar la expulsión de extranjeros que estén sin permiso de residencia en España o que se les excluya de las ayudas públicas. También reclama que no se faciliten ayudas a organizaciones que “trafican con personas”, en referencia a organizaciones como Open Arms, reconocida internacionalmente por su labor humanitaria.
Pese al contenido de la moción, Julio Calvo ha negado que tuviera un carácter xenófobo y racista y ha tratado de decir que su único objetivo era incrementar la seguridad y equiparar la normativa española a la de países como Canadá y Francia, aunque esta cuestión no está recogida en el texto de la propuesta. En cualquier caso, ha aludido a la entrada de “200.000 personas de forma ilegal” y “al aumento de la violencia”, poniendo como ejemplo algunos casos como los ocurridos, como dos homicidios en la calle Dato.
Todos los partidos se han desmarcado de la polémica propuesta. “Da vergüenza debatir esta moción”, ha dicho la socialista Lola Ranera, que ha considerado que se trata de “un salto cualitativo” por la gran cantidad de “bulos” y “falsedades”. “Es una moción que fomenta el odio. La delincuencia no está relacionada con el origen de las personas”, ha subrayado Ranera, que ha pedido al alcalde, Jorge Azcón, que trate de evitar que incluso se debatan.
El PP ha dicho que Zaragoza “es ciudad de acogida” y ha votado en contra. “La inmigración es un derecho universal, que además hemos utilizado muchos aragoneses”, ha afirmado el concejal de Acción Social, Ángel Lorén. Aunque ha evitado las críticas directas a Vox, ha hecho una reflexión sobre los nacionalismos, caracterizados en muchos casos por su rechazo a la llegada de inmigrantes, y ha dicho que se han reforzado los medios policiales en los últimos años.
Amparo Bella, de Podemos, ha explicado que en 2021 se produjo un descenso de la delincuencia del 11% y explicó el repunte de los delitos sexuales a la mayor concienciación de las mujeres a la hora de denunciar. “El contenido de esta moción es ilegal, xenófobo y contrario a la ley, la Constitución y la declaración de derechos humanos”, ha afirmado. Luisa Broto, de ZEC, ha acusado a Vox de dar “datos sesgados” y ha negado que en Zaragoza “haya oleadas de violencia”, como sostuvo la edil Carmen Rouco en una controvertida rueda de prensa en la que defendió esta propuesta el pasado miércoles.
Tras el aluvión de críticas, Julio Calvo se ha quejado de que se trate de “caricaturizar” a Vox y ha tratado de dar una pátina de normalidad a su propuesta. Pero no ha convencido a nadie y todos los partidos han rechazado en su integridad la propuesta. Los inmigrantes presentes en el salón de plenos han roto en aplausos con gritos de “Viva Zaragoza”.
