Cuando el calor llegó, la piscina se acabó

Las piscinas cerraron ayer una temporada marcada por el mal tiempo y la floja afluencia de bañistas. Sin embargo, el calor de los últimos días llevó a los usuarios a pedir al Ayuntamiento que sigan abiertas unos días más

Un grupo de adolescentes celebró ayer un cumpleaños en las piscinas de La Hípica.
Cuando el calor llegó, la piscina se acabó
Aránzazu Navarro

Ha sido una temporada de verano atípica, con semanas en las que incluso ha hecho fresco –sobre todo en julio– y con escasos episodios largos de calor, fundamentales para que las piscinas registren una buena entrada. Y eso ha hecho que el uso de estas instalaciones se haya reducido hasta tal punto que se está hablando de que este verano podrían registrarse las peores cifras de la última década, a falta de conocer cómo fue septiembre. Sin embargo, el tiempo ha vuelto a hacer de las suyas y esta semana recién finalizada ha sido una de las más calurosas del verano: ayer, último día de la temporada, hubo piscinas que registraron una más que aceptable asistencia por la mañana (luego se estropeó y muchos se marcharon). "Al final ha hecho calor y nos hemos bañado bastante. Pero esta es la segunda vez que venimos este año porque al principio hizo malo y después nos fuimos de vacaciones al pueblo y a La Pineda", comentaron Javier Roncal y Yolanda López, que pasaron la mañana en La Hípica con sus hijas Izarbe y Jara.


El calor de estos días llevó a los bañistas a pedir al Ayuntamiento que se alargue un poco más la temporada: "Debería haber más flexibilidad, aunque a partir de ahora solo abrieran los fines de semana", propusieron los propios Roncal y López.  "A mí pena de que cierren no me da ninguna, porque vengo por la cría. Pero la verdad es que podrían mantenerlas abiertas hasta que los colegios abran por la tarde", apuntaron Esperanza Andreu y Javier Sanz, que se bañaron con su hija Berta, de 7 años. "Hemos aprovechado el bono de temporada porque hemos venido todos los días excepto los que ha hecho muy malo –continuaron–. Incluso algún domingo nos hemos quedamos a comer".


"Nos sabe muy malo que las cierren ya, porque hasta las fiestas del Pilar hay días de calor. El Ayuntamiento debería plantearse dejar abiertas el 10%de las piscinas mientras tanto", propusieron por su parte Blanca Santamaría y Elisardo Fraca, que llevan casados 30 años. Viven en el Actur y no suelen ir a La Hípica porque les pilla lejos, pero ayer se acercaron "para recordar viejos tiempos", ya que cuando eran jóvenes utilizaban estas instalaciones.


Sin embargo, no parece que el Ayuntamiento vaya a estar por la labor de satisfacer estas peticiones ciudadanas: ni las consabidas limitaciones presupuestarias que sufre ni el déficit que generan estas 22 instalaciones (que suele superar los siete millones de euros todos los años) invitan a ello. También hay que recordar que esta temporada han cerrado una semana más tarde que la anterior.