Al son de tres gaitas de boto, los vecinos de Bujaraloz formaron un amplio círculo y, como manda la tradición, intercalando hombres y mujeres, danzaron en honor de la Virgen de las Nieves.

El acto, que tuvo lugar la noche del pasado lunes, otorga, junto al canto del romance, un marcado carácter tradicional a las pequeñas fiestas de la localidad. 

De hecho, el baile de la gaita se remonta mucho tiempo atrás y, junto a la propia patrona, está asociado al fin de una terrible epidemia de peste que asoló la población, según explicó el concejal de Fiestas, Chusé Rozas.

El programa de actividades, que finalizó ayer con el reparto de mistela y magdalenas, incluyó además la ronda jotera de quintos, la presentación de las  Damas y Acompañantes 2014, carreras de pollos, así como espectáculos musicales, y de nuevo el canto del romance a la Virgen de las Nieves, pero esta vez sin baile. 

Del 27 de agosto al 1 de septiembre, Bujaraloz celebrará sus fiestas mayores en honor de San Agustín y, entre otros actos, actuará el grupo de dance.