El Observatorio Urbano de la Bicicleta ha acordado este miércoles “por consenso” solicitar la modificación de la actual ordenanza de Circulación de Peatones y Ciclistas de Zaragoza para cambiar la regulación actual sobre el uso de las bicicletas de las aceras y zonas peatonales.

En concreto, este organismo pide que los ciclistas solo puedan usar aquellas aceras señalizadas específicamente para tal efecto. Como explica el presidente del Observatorio, Pablo Muñoz, “en realidad son apenas 50 en toda la ciudad, por lo que muchos de los ciclistas que hasta ahora usaban las zonas peatonales se deberán desplazar a la calzada”.

Además, dada esta previsible ‘migración’ al espacio reservado a los automóviles, el Observatorio reclama una identificación de los puntos negros de la capital aragonesa donde la circulación de bicicletas en la calzada es más complicada y, en la misma línea, ampliar la red de carriles-bici.

Para ello, “se podrían utilizar 150.000 euros reservados en Urbanismo sin determinar para comenzar con esta ampliación en la avenida de Valencia”, señala Muñoz, ya que “se trata de un claro ejemplo de gran calle con dificultad para la circulación de ciclistas”.

Muñoz trasladará estos acuerdos del Observatorio, que ha contado con Acera Peatonal como asociación invitada, a la comisión política creada con el fin de abordar la sentencia del Tribunal Supremo (TS) que invalida buena parte de los puntos de la ordenanza municipal.

Sin miedo a la sentencia

En la reunión del Observatorio de la Bicicleta se ha analizado la sentencia del TS y las posibles afecciones a los ciudadanos y al propio Ayuntamiento. En este sentido, Muñoz se ha adherido al sentir de la consejera de Movilidad, Carmen Dueso, para quien la aplicación del fallo judicial “seguramente” no llegará a la práctica.

Los plazos que maneja el Consistorio hablan del mes de septiembre, y para entonces, “está previsto que ya se haya aprobado el nuevo reglamento de la Ley de Tráfico, que validarían las prácticas lógicas contenidas en la actual ordenanza”.