Cedido de forma gratuita

El Zaragoza mantiene en estado de abandono el edificio cedido por el Ayuntamiento

Un año después de que el Consistorio cediera de forma grauita parte del inmueble anexo a La Romareda para ampliar el antepalco, el club sigue sin saber si acometerá el proyecto.

El edificio lleva cinco años sin ser usado.
El edificio lleva cinco años sin ser usado.
A. M. B.

Hace un año, y tras una petición formal del Real Zaragoza, el Ayuntamiento cedió a precario al club dos plantas de la antigua sede de la Gerencia de Urbanismo -el edificio anexo a La Romareda-. La intención de la entidad pasaba por acometer una ampliación del antepalco para, según señaló a Heraldo de Aragón el presidente de la entidad, Agapito Iglesias, paliar "los problemas de espacio del palco y de su zona de acceso". Para ello se aprovecharía el primer nivel del edificio.


Además de servir de desahogo del espacio VIP del estadio, el club tenía trazados otros planes para el inmueble. Parte de la planta baja iba a ser destinada a una zona para que los medios de comunicación tuvieran mejores condiciones de trabajo los días de partido y se habían proyectado mejoras en la accesibilidad para personas con movilidad reducida. Además, el club planeaba crear accesos entre las dos alturas de la edificación y el recinto deportivo.


A día de hoy no se ha solicitado ninguna licencia ni hay proyecto para acometer ningún tipo de obra y en el interior del inmueble, que no ha sido utilizado, se acumula el viejo mobiliario empleado en su momento por los funcionarios municipales. El edificio presenta grietas, y a lo largo de los últimos años ha evidenciado numerosas carencias en forma de filtraciones e, incluso, desprendimientos de los techos.


Por el (supuesto) usufructo de los más de 1.300 metros cuadrados el Zaragoza no realiza aportación alguna a las arcas de la ciudad, aunque cualquier coste derivado de una obra menor correría de su cuenta. Asimismo, el Ayuntamieno puede recuperar las dependencias en cualquier momento, si bien fuentes municipales señalan que "no se contempla esa posibilidad".


Desde el club apuntan hacia la "falta de tiempo" como principal causa de que no se haya actuado hasta el momento y aseguran que, a corto plazo, se va a "estudiar qué se puede hacer", si acometer el proyecto planteado hace un año u olvidarse de él.


Criticas desde la oposición


La cesión generó en su momento cierto recelo entre los grupos municipales de la oposición (especialmente en el PP y en CHA) al entender que un equipo de élite, privado y en concurso de acreedores no debía contar con un privilegio del que no disponían diferentes entidades zaragozanas de carácter social. Este malestar político se acrecentó al conocer que el Ayuntamiento apenas había tardado apenas doce días en atender y aprobar la petición por escrito de Agapito Iglesias. El concejal del PP Pedro Navarro tildó la operación de "trato de favor".


Desde CHA se ha llegado a pedir, en varias ocasiones, la demolición inmediata del inmueble.


Construido hace tres décadas


El anexo al estadio municipal fue erigido a principios de la década de los 80 para servir de espacio de trabajo para la prensa internacional desplazada a Zaragoza durante la Copa del Mundo de fútbol de 1982.


A pesar de que la intención del Gobierno de la ciudad pasaba por eliminar el bloque tras la cita mundialista, finalmente se desechó esta opción, y tras un tiempo vacío se destinó a las actividades del área de Urbanismo.


Con el traslado al Seminario y tras las quejas de los trabajadores -que llegaron a denunciar la caída de cascotes sobre las mesas- el edificio quedó finalmente sin uso y en un claro estado de abandono, que perdura hasta el día de hoy.