Los acampados preparan su 'recibimiento' a los jueces de la capitalidad cultural

Fregar, no tirar colillas, ni botellas de alcohol y «poner un poco de lejía» cuando se limpian la zonas comunes son algunas de las diferencias de andar por casa que comienzan a aflorar entre los acampados de la plaza del Ayuntamiento.

Discusiones más serias también se han colado en la asamblea interna celebrada esta mañana, en la que algunos de los 'indignados' han denunciado la expulsión de una compañera de una de las comisiones: en plena reunión, uno de los presentes pidió el micrófono y se puso de pie para exigir «transparencia» y no expulsiones, aunque no se atrevió a dar nombres de los involucrados en el caso.

«Debemos organizarnos, aunque no tanto, por aquí todo el mundo puede entrar a una comisión», afirmó el portavoz de la comisión de organización, en una intervención en la que se habló de una posible mudanza a los barrios. «Hay que ver dónde y buscar gente para que ofrezcan charlas», sugirió un acampado.

Aunque en ese punto también hay divergencias: unos quieren que sea hagan acampadas pararelas y otros que todo el movimiento se disperse. En total, fueron unos 50 los jóvenes que se han reunido por la mañana para hablar sobre el presente y el futuro de la acampada, aunque muchos de los portavoces de las comisiones eran personas mayores.

Esta noche, en la asamblea política, se intentará llegar a un consenso mínimo en «dos o tres puntos», como explica Álvaro, uno de los portavoces del movimiento, que adelantó algunas de las acciones que se llevarán a cabo el lunes, cuando estén en la ciudad los jueces que evaluarán la candidatura de Zaragoza 2016.

«Queremos que vean que la cultura está en la calle y no es eso que les muestra, esa versión oficialista. Hacemos un llamado para que todos lo que quieran mostrar su talento salgan a la calle», aseguró Álvaro.

De momento han preparado performances y recitales de poesía que se realizarán a lo largo de recorrido del comité de selección de Zaragoza 2016. «No es un boicot, es mostrar dónde esta el arte de verdad. Son acciones reinvindicativas», insistió el 'indignado'.

Sobre los rumores que surgieron ayer por la noche, sobre una posible acción rebelde en contra de las sedes de los bancos (pintarlas con símbolos del 15-M), Álvaro aceptó que fue una sugerencia de uno de los compañeros, pero que no está en acta y «el movimiento se desvincula totalmente».

Lo que sí han pedido a los ciudadanos es que se saquen 155.55 euros de su cuenta bancaria para protestar «contra el sistema financiero»: