Por el paso de peatones, por las pasarelas, acortando en diagonal y por en medio de la calzada. Acostumbrados a que las obras del tranvía les hayan dejado durante meses la vía para ellos solos, los viandantes que caminan por Fernando el Católico siguen cruzando de lado a lado sin mirar ni, en la mayoría de los casos, respetar las bandas blancas pintadas en el suelo. El Ayuntamiento de Zaragoza abrió ayer a la circulación el carril en sentido salida de la ciudad desde la avenida de Goya hasta la plaza del Emperador Carlos y la incorporación del tráfico rodado regaló pitidos a unos cuantos.

“Llevamos tiempo con esta zona peatonal y pasando sin fijarnos, así que ahora lo seguimos haciendo por inercia sin darnos cuenta de que vienen los coches”, explicaba Anselmo Bengué, tras acelerar el ritmo y llegar a la acera del paseo con un salto para librarse de una motocicleta. Los servicios municipales han habilitado una pasarela que cruza Goya y enlaza con Fernando el Católico. Cuando esta acaba, un paso de peatones permite el tránsito del bulevar central a las aceras de Fernando el Católico.

Ayer, varios agentes locales se desplegaron por la zona para ayudar a regular el paso. “No nos queda otra que ir con cuidado y despacio porque en cualquier momento te sale alguien cruzando por donde le parece. Supongo que por eso habrán puesto policías”, comentaba la motorista Pilar Arturo, mientras esperaba a que se pusiera en verde el semáforo de Goya esquina con el paseo reabierto.

Con esta apertura, el tráfico queda ya normalizado todo en sentido salida por Fernando el Católico, Isabel la Católica y Vía Ibérica (antes se iba por el otro carril que ha quedado cerrado). Sin embargo, los comerciantes de la zona consideran que su situación no volverá a ser como era hasta que todo quede “limpio”. “De momento no hemos notado diferencia ni mejora, pero claro, es el primer día que se abre. El cambio no se dará hasta que quede limpio el paseo”, apuntaba Pueyos Martínez, dependienta de la tienda de ropa Tacatuca.

Nuevos cortes de tráfico

La “normalidad” en la vía de la que habla el Ayuntamiento se verá interrumpida el lunes, cuando el fresado y asfaltado del cruce de Goya, tanto en sentido Portillo como en sentido Tenor Fleta, obligará a desviar el tráfico de forma provisional (de las 20.30 del lunes a las 7.30 del martes).

Los primeros afectados serán quienes circulen por Goya en sentido El Portillo, que deberán girar por Alférez Provisional y continuar por Poeta Marco Marcial y Calatayud. Después se asfaltarán los carriles del cruce de Goya con Fernando el Católico. De esta manera quienes circulen hacia Sagasta tendrán que ir por Baltasar Gracián y Corona de Aragón.