La tensión entre el concejal de Economía, el socialista Francisco Catalá, y el edil del PP Sebastián Contín rebasó ayer los límites de la crítica política para pasar directamente a la descalificación personal. Los ataques del representante popular a las tareas desempeñadas por dos trabajadoras del grupo socialista en la Oficina de las Naciones Unidas para la Década del Agua causaron una desaforada reacción de Catalá, que aseguró que Contín "es la rata que utiliza la señora Rudi para escarbar en la basura". El aludido replicó que "lo de convertir a personas en ratas es más propio de la Alemania del 39 al 45".

La polémica arrancó con la comparecencia de los concejales del PP José Manuel Cruz y Sebastián Contín, que aseguraron que "el PSOE está politizando" la Oficina de las Naciones Unidas. Dijeron que su directora, Josefina Maestu, fue "asesora" de la ex ministra socialista Cristina Narbona y que la número dos de la entidad "fue diputada del PSOE en Castilla y León".

Además de afirmar que "con el PSOE de patrón, la Oficina pinta menos que Marichalar en el Museo de Cera", Contín aseguró que dos trabajadoras del grupo municipal socialista (una fue en listas) trabajaron en la oficina. El edil del PP recordó que Catalá negó que el Ayuntamiento hubiera adscrito a personal municipal a la Oficina en la última comisión de Economía.

Contín acusó a Catalá de "mentir de forma sistemática". "Desconocemos el proceso de selección, su titulación o si hablan algún idioma para integrar un equipo internacional", afirmó Contín, que calificó de "corruptela" convertir un servicio de un organismo de la ONU en "una agencia de colocación socialista".

Preguntado Catalá por este asunto, negó que las dos trabajadoras del PSOE hubieran sido adscritas, por lo que rechazó haber mentido. Afirmó que una adscripción requiere de una resolución administrativa. Indicó que se trató de una colaboración de dos eventuales del grupo, que no pudo precisar, y destacó que no supuso coste para el Ayuntamiento. "Que alguien haya colaborado puntualmente con la Oficina de la Década del Agua, puede ser, pero no personal adscrito, que es lo que preguntó Contín", dijo.

Lamentó que el PP hable de la ideología del personal de la ONU. "Desconozco su tendencia política, religiosa o sexual. Demuestra el señor Contín que representa a la derecha más cutre y más extrema de la ciudad al hacer preguntas tan sectarias", afirmó. Añadió que "es la rata que utiliza Rudi para escarbar en la basura". Pese a estas palabras, acto seguido afirmó que el edil popular "no tiene derecho a insultar" y amenazó con tomar "medidas especiales", aunque no quiso decir cuáles.

Tras conocer estas descalificaciones, Contín optó por elevar el tono. "Debería preocuparse de cubrir la plaza de interventor, vigilar la legalidad de la contratación, pagar a tiempo a los proveedores o frenar la deuda", dijo. Después concluyó: "Él mejor que nadie sabe cómo se genera la basura de la que habla. Y lo de convertir a personas en ratas es más propio de la Alemania del 39 al 45".