AFECCIONES

Las líneas de bus afectadas por el tranvía ganan 5.124 viajeros diarios

Tres de las ocho rutas desviadas, 30, 40 y 141, han pinchado en el último mes, pero las circulares, la 35 y la 53 disparan sus cifras gracias al trasvase de usuarios detectado.

Las doce líneas de autobús urbano afectadas por las obras del tranvía de Zaragoza transportan una media de 5.124 viajeros al día más desde que comenzaron los desvíos el pasado 21 de septiembre. La empresa adjudicataria del transporte urbano, Tuzsa, contabilizó la semana pasada casi 36.500 viajeros más respecto a la previa a los cortes de la Gran Vía, Isabel la Católica y Vía Ibérica, lo que supone un incremento de un 4,1%. La utilización del transporte público podría incluso subir algo más a partir del martes, cuando se corte también el paseo de Fernando el Católico y los vehículos privados tengan un poco más complicado atravesar el casco urbano.

 

Los datos revelan que tres de las ocho rutas desviadas, la 30, 40 y 141, han pinchado en el último mes, hasta el punto de ver reducido el número de viajes: la más afectada, la 40, ha perdido un 9,3%, mientras que la 141 lo ha hecho en un 3,9% y la 30, en un 0,1%. El resto de las líneas que han variado el recorrido, 20, 42, 45, C3 y C5, han ganado viajeros en un porcentaje que oscila entre el 1,8% y un 6,7%. De esta forma, se confirma que los vecinos del entorno de las obras del tranvía han optado por dejar el coche en casa y recurrir al autobús, aunque las paradas se hayan movido entre 200 y 400 metros.

 

Una ganancia menor

Sumando todos los viajes contabilizados la semana pasada de las ocho líneas desviadas se aprecia una ganancia media diaria de 2.721 usuarios, un número que aún es mucho mayor en los días laborables.

 

Fuentes oficiales del área de Servicios Públicos señalaron que en el primer mes de desvíos también se ha detectado un importante trasvase de usuarios tradicionales de estas líneas a las que pasan por el entorno, como son la 35, la 53 y las circulares C1 y C2. Estas dos últimas han disparado los viajes en casi un 18% y un 14%, respectivamente, mientras que la 53 lo ha hecho en un 6,3% y la 35, en un 16,5%. En total, la media diaria de las doce líneas afectadas por las obras ronda los 130.000 usos.

 

Desde Tuzsa se apuntó que los nuevos desvíos que entran en vigor a partir del martes solo beneficiarán al transporte público, dado que los recorridos y las frecuencias se prevén mantener como hasta ahora.

 

Para lograrlo, se deberá emplear a fondo la Policía Local, ya que el medio centenar de autobuses que prestan servicios en las rutas desviadas circularán por el eje de las calles de Pedro Cerbuna, Cortes de Aragón y Hernán Cortes, donde suele haber muchas dobles filas. No obstante, supondrá una dificultad añadida para los conductores que pretendan seguir llegando al centro por este eje viario.

 

El Ayuntamiento calcula que unos 8.000 vehículos han dejado de pasar por la zona, ya sea porque se dejan aparcados en casa (la estimación ronda los 2.500 coches) o porque directamente los conductores optan por buscar rutas alternativas, especialmente por los cinturones.

 

Las citadas fuentes de Servicios Públicos manifestaron que el uso del transporte público también se ha incrementado en el resto de líneas de la ciudad a lo largo del último mes. La media de toda la red de Tuzsa es un poco inferior a las líneas afectadas por las obras del tranvía, ronda el 3,25, pero en un número se aprecia mucho mejor la positiva evolución: 13.503 viajes de media se registran los días laborables, lo que hace un cómputo semanal de 81.020 usuarios nuevos.

 

Los números son muy estables desde el 21 de septiembre, ya que Tuzsa registra desde entonces todas las semanas en torno a 2,5 millones de viajeros en toda la red. Las excepción fueron las dos semanas que coincidieron con las fiestas del Pilar, durante las cuales se disparó el número de usuarios hasta rozar los tres millones.

 

Esta evolución tiene su consecuencia directa en las arterias de la ciudad, que están más descongestionadas. De hecho, las retenciones solo se están registrando en la hora punta de la mañana. Expertos en movilidad consultados achacaron esta apuesta por el transporte público a los efectos de la crisis económica y no tanto al civismo de los ciudadanos.