EXPO 2008

El Náutico abrirá sus terrazas en junio y el restaurante se retrasa hasta agosto

La estructura del edificio está lista y la fachada se acabará para la inauguración de la Expo. La crecida, cuya punta llega mañana, solo afecta a la pavimentación de la plaza inferior.

El Club Náutico podrá estrenar su nueva imagen para la Expo, aunque será un contenedor vacío buena parte del verano. Lucirá sus fachadas y se podrá bajar al río por las escaleras y ascensores panorámicos que se están montando ahora, pero solo podrá abrir dos terrazas exteriores para finales de junio ante el retraso acumulado. La cafetería y restaurante previstos en el interior estarán listos, en el mejor de los casos, para el mes de agosto, ya que los trabajos de acondicionamiento ni siquiera han empezado a estas alturas.


El director de las obras del Náutico, Alberto Navarro, aseguró que el equipo de estructura acabará su trabajo esta semana, una tarea que se compatibiliza desde hace semanas con la instalación de fachadas. La primera de las dos plantas luce su cerramiento de aluminio marino, impermeable y capaz de soportar crecidas, mientras que el "muro cortina" de cristal se empezará a montar la próxima semana.


Alberto Navarro señaló que la crecida del Ebro no está afectando pese a que ha inundado el camino habilitado en la ribera. El material se descuelga desde el paseo de Echegaray, y la punta de caudal que se espera para mañana de madrugada no llegará a anegar la parte baja. "Solo afecta a la pavimentación del camino de ribera, porque hemos instalado hasta el pantalán. El problema es la lluvia, que ralentiza la urbanización", añadió.


Tampoco hay afecciones en el recinto de Ranillas, donde el tiempo dio un día de tregua. Sin embargo, el cauce acabó por engullir la península que comunica la ribera de La Almozara con el escenario del iceberg.


Las gradas situadas entre el edificio y el Puente de Piedra, de hormigón blanco, ya cubren los siete metros de desnivel existente entre el paseo de Echegaray y el cauce. "Nos faltan unos pocos escalones, que pesan 700 kilos y vienen prefabricados de Valencia. La rampa peatonal, de acero corten (oxidado) y cubierta con tarima de madera, está hecha, pero hemos dejado los remates de unión con la ribera y el paseo para el final", detalló.


A la fachada inferior del Náutico tan solo le faltan los vidrios triangulares que garantizarán la luz, una tarea que pretende acometer esta semana la adjudicataria, Constructora San José. Al mismo tiempo se trabaja en la instalación del segundo de los ascensores panorámicos y en la pavimentación de la cubierta, al mismo nivel del paseo de Echegaray y que servirá de mirador privilegiado al Ebro. "Se ha colocado dos tercios del granito", manifestó Navarro.


El director de las obras indicó que los voladizos del nuevo Náutico también se están ejecutando con aluminio marino. "Ya hay una una cuarta parte".


Alberto Navarro incidió en que el objetivo es terminar la obra exterior para el 14 de junio y seguir trabajando en remates de la carpintería en el interior. "Trabajamos a triple turno. Por el día, unas 40 personas y por la noche, dos equipos que suman 10 operarios y que se dedican, sobre todo, a la preparación de los trabajos del día siguiente", agregó.


El avance de las obras permitiría, incluso, iniciar el acondicionamiento interior de la cafetería y restaurante. El problema reside en que el retraso para encontrar un explotador (el concurso municipal llegó a quedar desierto) ha impedido la pretensión de inaugurarlo para la Expo.


Fuentes oficiales de la empresa explotadora, Domingo Rubio Asociados, señalaron que trabajan para abrir las dos terrazas previstas (una en la cubierta y otra en la plaza de la ribera) a finales de junio. Su superficie sumará unos 1.400 metros cuadrados, y se ofrecerá "bebidas y picoteo" para un máximo de 500 personas. Su horario será de día y noche, como el resto de negocios de restauración que abrirán en las riberas del Ebro.


La concesionaria también espera inaugurar la cafetería y restaurante del Náutico en agosto. Darán cabida a unas 300 personas y celebrarán también banquetes. Las citadas fuentes indicaron que al frente de la cocina habrá un profesional "famoso", cuyo nombre, añadieron, no se puede aún adelantar. En la cafetería, de unos 300 metros cuadrados, se ofrecerán platos combinados y menú del día.


La empresa prevé invertir en las instalaciones cerca de cinco millones de euros. Estará al frente del negocio por un periodo de 40 años. "Pretendemos que sea referencia en diseño y ofrecer una oferta culinaria importante a la carta", concluyeron.