La directora general de Patrimonio Cultural, Marisancho Menjón, ha anunciado este domingo en Teruel el inicio inmediato del proceso para declarar como lugar de memoria democrática de Aragón a Los Pozos de Caudé, una fosa común improvisada en unos antiguos pozos a la que fueron arrojados más de mil republicanos ejecutados por los sublevados durante la Guerra Civil. Menjón ha adelantado que la memoria justificativa de la declaración está ya muy avanzada.

Menjón, que ha participado en los actos de homenaje a las víctimas de la fosa que ha organizado la Asociación Pozos de Caudé, se ha mostrado en declaraciones a la prensa dispuesta a estudiar la exhumación e identificación de los cuerpos arrojados a los Pozos, pero ha advertido de la dificultad técnica de la operación. 

La directora general ha señalado que desde el Gobierno aragonés se ha "dado muchas vueltas" a la posible exhumación de los cuerpos arrojados a Los Pozos de Caudé, pero ha aclarado que "es muy difícil" extraer los restos al estar acumulados en una perforación vertical de 84 metros de profundidad. Aunque en "las primeras capas" la operación sería factible, se complicaría mucho al profundizar. 

Ha apuntado que sería necesario un "proyecto de ingeniería" consistente en la realización de un pozo paralelo desde el que se pudiera acceder a las distintas capas de la fosa. Ha admitido que no puede adelantar si esta solución sería factible.

Se ha mostrado más convencida de la posibilidad, planteada por el presidente de la Asociación Pozos de Caudé, Francisco Sánchez, de construir un recinto cubierto junto al monumento actual para plasmar los nombres de todas las víctimas y facilitar el homenaje de los familiares. 

Sánchez ha agradecido la asistencia al homenaje y la colaboración de distintas Administraciones en los proyectos de la Asociación para la excavación de fosas comunes de la Guerra Civil y la posguerra, como la que empezará en breve en Villel.

Heraldo.es

Homenaje a "Los ocho de Gúdar"

Durante la celebración de los actos del 1 de Mayo en Los Pozos, se ha dedicado un reconocimiento especial a "Los ocho de Gúdar", ocho vecinos de esta localidad turolense que fueron ejecutados en los inicios de la Guerra Civil en aplicación de la ley de fugas y que estaban encarcelados desde mayo de 1936 por una ocupación de tierras.

La sobrina-nieta de una de las víctimas y portavoz de las familias de "Los ocho de Gúdar", Alba Boix, ha lamentado la "odisea" a la que se ven sometidas las familias de víctimas republicanas de la Guerra Civil cuando buscan conocer "la verdad" de lo que les ocurrió a los fallecidos. 

Boix ha explicado que todo empezó con la ocupación por dos jóvenes de 17 años de las tierras de un propietario local para mejorar sus condiciones de vida. Como consecuencia de aquel hecho y de la posterior reacción de la Guardia Civil, se produjo un tumulto popular que terminó con ocho vecinos detenidos en Teruel, todos con edades comprendidas entre 17 y 33 años. 

La Guerra Civil estalló mientras los ocho detenidos por la ocupación de tierras estaban encarcelados en Teruel. Un vecino informó a las familias de que los ocho arrestados habían sido ejecutados al empezar la contienda, pero no ha sido hasta ahora cuando las familias han tenido acceso al procedimiento judicial abierto contra ellos, que concluye relatando las ejecuciones cuando, supuestamente, intentaban fugarse.