El neandertal habría destacado en judo y halterofilia

El hombre de Neandertal, la especie extinta de homo sapiens que habitó en buena parte del Planeta hace 230.000 años, hubiera destacado en las disciplinas deportivas de judo y halterofilia. A esta conclusión llega el paleontólogo Juan Luis Arsuaga, doctor en la Universidad Complutense de Madrid y uno de los miembros del jurado de Dinópolis que ha premiado un trabajo de investigación que desvela importantes datos sobre la caja torácica de aquel homínido.

El estudio, que ha logrado recomponer tridimensionalmente el tronco del neandertal, algo no conseguido hasta ahora, revela que los individuos de esta especie tenían una capacidad pulmonar un 20% mayor que la de un humano moderno en su misma talla. Se desconoce si estos homínidos practicaban algún deporte, pero, de haberlo hecho, sostiene Arsuaga, hubieran sido muy buenos en “esfuerzos de tipo explosivo”, donde también tendría cabida el rugby.

Su gran masa muscular en relación a la estatura, su ancho cilindro corporal y su centro de gravedad situado a un nivel bajo -la gran corpulencia explicaría su mayor necesidad de oxígeno- habrían contribuido a ello.

Por contra, no serían buenos corredores de fondo, algo que los diferencia de la especie humana actual, dotada de una biomecánica que nos permite caminar largas distancias e incluso correr durante prolongados trayectos de manera muy eficiente, es decir, con poco gasto energético.

Los autores del trabajo, Daniel García, Nicole Torres, Isabel Torres, Francisco García, Antonio Rosas y Markus Bastir, del Museo Nacional de Ciencias Naturales y el Hospital Universitario La Paz de Madrid, han recibido 4.500 euros al ser los ganadores de la decimoséptima edición del Premio Internacional de Investigación en Paleontología, ‘Paleonturología’, que convoca cada año la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis.

El galardón cuenta con la colaboración de la Caja Rural de Teruel, cuyo responsable de Zona, Juan Mangas, ha expresado el “orgullo” de la entidad bancaria al poder respaldar el premio.

Buena parte del mérito del trabajo distinguido reside en haber sabido dar volumen a la caja torácica del neandertal, una tarea muy complicada teniendo en cuenta que los huesos de esa parte del cuerpo son muy frágiles y se aplastan en el proceso de fosilización, por lo que los paleontólogos se encuentran con una visión plana -en dos dimensiones- de lo que debió ser la estructura ósea del hombre antiguo.

El director gerente de la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel-Dinópolis, Luis Alcalá, ha destacado la dificultad a la hora de elegir un trabajo ganador de un total de 38, la mitad de los cuales reúnen calidad suficiente para recibir el premio.

Otro miembro del jurado ha sido el doctor Samir Zouhri, de la Universidad Hasan II de Casablanca (Marruecos), quien ha resaltado que Dinópolis es un modelo a seguir, al haber sido pionero en la divulgación del conocimiento sobre paleontología. Ha lamentado, no obstante, que en su país los jóvenes no están involucrados en esta materia.

El investigador Humberto Ferrón, premiado en la pasada edición por su trabajo sobre tiburones gigantes extintos y, asimismo, miembro del jurado de la convocatoria actual, ha destacado que el trabajo premiado aborda un aspecto de la evolución humana que no se había tocado hasta ahora, por lo que reviste un valor innegable.

Por su parte, la gerente de Dinópolis, Higinia Navarro, ha recordado que la comunicación oficial del ganador de ‘Paleonturología’ -que además del premio en metálico conlleva la difusión del trabajo galardonado- se ha convertido en una tradición que marca el inicio de las vacaciones navideñas.