La concesión del bus a Zaragoza que se suprimirá el día 18 caducó ya en el año 2009

La concesión del primer autobús de línea que comunica a diario Teruel con Zaragoza, cuya supresión está prevista a partir del 18 de julio, está caducada desde 2009. La prestación del servicio en precario impide a la Administración intervenir de ningún modo para que la compañía gestora, Autobuses Jiménez, mantenga la prestación. El anuncio de que la conexión desaparecerá de lunes a jueves por su nula rentabilidad ha provocado criticas en el corredor del Jiloca, que utiliza este bus –que parte de la capital turolense a las 7.00– para llegar a Zaragoza con tiempo de hacer gestiones para regresar en el mismo día.

La concesión de la línea corresponde al Ministerio de Fomento, pero el periodo de adjudicación se agotó hace siete años y los sucesivos procesos de licitación han resultado fallidos. Jiménez argumenta que los vehículos que hacen el trayecto llegan a la capital aragonesa con apenas media docena de pasajeros. El servicio se mantendrá los vienes y sábados y, como ya ocurre actualmente, no funcionará los domingos.

Los habitantes del Jiloca resaltan que el autobús de las 7.00 es el más útil para viajar a Zaragoza. Tras el recorte, la conexión comarcal con la capital aragonesa se limitará a un bus que parte de Teruel a las 14.00.

El consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, explicó ayer que la DGA ha iniciado contactos con Fomento para que la conexión Teruel-Zaragoza pase a manos del Gobierno de Aragón para proceder en 2018 a su adjudicación dentro de un plan de transporte de viajeros para toda la Comunidad. Soro reconoció que mientras el servicio Teruel-Zaragoza esté en manos de Fomento «desde la DGA no se puede hacer nada» para garantizar su continuidad. Añadió que tampoco Fomento puede intervenir porque la prestación está en precario.

El consejero adelantó que el mapa aragonés de autobuses de línea planteará concesiones «zonales» y no por trayectos y procurará que las pequeñas compañías no queden excluidas de la explotación.

La alcaldesa de Teruel, Emma Buj, se pronunció en contra del recorte de los autobuses que unen la ciudad con Zaragoza. El presidente de la comarca del Jiloca –la más afectada–, José Antonio Ramo, criticó la medida y adelantó que en el pleno comarca previsto para hoy, miércoles, propondrá la aprobación de un escrito para manifestar un rechazo «total» contra el recorte. Ramo confió en que todos los grupos se sumen a la propuesta, que también rechazará la anunciada eliminación del servicio Odón-Tornos-Torralba-Calamocha hasta septiembre.