El control de alcoholemias en las carreteras, prioritario en el plan de seguridad de la Vaquilla
La Policía Nacional utilizará una unidad canina para detectar la presencia de drogas en las estaciones de tren y bus y en los vehículos que llegarán a la ciudad.
El dispositivo de seguridad de las próximas fiestas de la Vaquilla de Teruel, que se celebrarán entre el 1 y el 11 de julio, estará formado por 372 agentes, entre guardias civiles, policías nacionales y policías locales. El operativo, que se ultimó ayer en una Junta de Seguridad, incluirá la realización de controles de alcoholemia y consumo de drogas en todas las salidas de la ciudad en los días centrales de la fiesta: el 8, 9, 10 y 11 de julio. La vigilancia policial tendrá también especial atención para abortar la entrada de partidas de droga para su distribución durante los festejos. La Policía Nacional utilizará una unidad canina para detectar la posible presencia de estupefacientes.
El secretario general de la Subdelegación del Gobierno, Vicente Ramos, recurrió al viejo eslogan "si bebes no conduzcas" para resaltar la importancia de no consumir alcohol antes de ponerse al volante. Los controles en los accesos a la ciudad impedirán continuar su camino a los automovilistas que den positivo. Ramos recordó que, en 2015, solo en un día el domingo de la Vaquilla, se controlaron 3.740 vehículos. La Policía Nacional desplegará 130 agentes, que incluyen la dotación de la Comisaría y las unidades de refuerzo, entre las que figuran también un equipo especializado en intervenir en grandes aglomeraciones y otro para prevenir robos y la actuación de carteristas.
La Junta de Seguridad tuvo en cuenta como principal novedad la habilitación de una zona de acampada en San León para evitar la presencia de coches aparcados irregularmente a las afueras de la ciudad y la acampada libre. El Ayuntamiento instalará señalización para orientar a los visitantes hacia el campin en las entradas a Teruel desde Valencia, Alcañiz y Zaragoza.
La alcaldesa, Emma Buj, explicó que los accesos a la ribera del Turia, donde en años anteriores proliferó la acampada ilegal, se cortarán con cadenas para impedir el paso de vehículos. Emma Buj advirtió de que las personas que intenten acampar junto al río serán "desalojadas" y derivadas a la nueva zona de acampada.
El domingo de La vaquilla, para facilitar el acceso a la estación de autobuses complicado durante la fiesta por la presencia de público en las calles, la entrada de los buses destinados a recoger expediciones de visitantes retrasarán su hora de llegada a la terminal de las 6.00 a las 7.30.
En la plaza del Torico, se repetirá la experiencia de 2015 de prohibir la entrada de envases de cristal durante la multitudinaria colocación del pañuelico para evitar cortes con vidrios rotos. Además, para facilitar la limpieza del pavimento, la música se apagará entre las 17.00 y las 19.00.
Tras unos años de caída en el número de barras callejeras que se instalan durante la Vaquilla, 2016 registra un repunte al sumar 23 solicitudes, frente a las 19 de 2015. La subida rompe una larga trayectoria descendente desde que en 2009 una sentencia limitó el volumen de la música que emiten los equipos de los hosteleros en la calle. Buj señaló que, previsiblemente, todas las peticiones serán aprobadas al cumplir la normativa.
Por otro lado, el Centro Comercial Abierto lanza la campaña "Por una fiesta en positivo... Vive la Vaquilla con los cinco sentidos", destinada a concienciar a los vaquilleros sobre la necesidad de cuidar la ciudad para que "cuatro días" de fiesta no empañen el trabajo desarrollado durante años para promover a Teruel como ciudad turística. El objetivo de los comerciantes es que a medio plazo mejore el civismo y las calles se vean libres de basura.
