La Guardia Civil ha detenido a dos personas en Lledó acusadas de robar 400 euros en joyas de un domicilio, al que habían accedido haciéndose pasar por comerciales de una empresa eléctrica.

Las víctimas de robo son un matrimonio de 80 y 85 años de esta localidad turolense, que denunciaron cómo un grupo de cinco personas, dos mujeres y tres hombres que aseguraban ser comerciales de una empresa eléctrica, habían estado en su casa explicándoles ofertas relacionadas con el consumo eléctrico.

Tras su marcha, los ancianos echaron de manos joyas por valor de 400 euros, según explica el Instituto Armado en una nota.

La Guardia Civil organizó entonces un operativo que les permitió localizar el vehículo utilizado por los supuestos ladrones, y los agentes esperaron a que regresaran.

Cuando uno de ellos se percató de la presencia de la Guardia Civil realizó un movimiento sospechoso tras una jardinera de un portal de una vivienda cercana y en ese lugar los agentes encontraron las joyas sustraídas.

Las mismas fuentes explican además que este ladrón portaba también una cantidad de marihuana destinada a consumo.

Los agentes identificaron a C.H.R. y A.E.G. como presuntos autores de un delito de hurto.

La investigación realizada ha permitido imputarles además otro delito de hurto de joyas en Tardienta donde utilizaron el mismo "modus operandi".

Los detenidos, junto con el atestado y efectos recuperados, han sido puestos a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Alcañiz.

La Guardia Civil recuerda que la primera medida de seguridad para evitar este tipo de hechos es no permitir el acceso al domicilio a personas que se presenten como trabajadores de empresas eléctricas o de gas, ya sea para inspección o supervisión de contrato, si no ha habido una comunicación previa.

Además, la Guardia Civil aconseja solicitar un presupuesto previo antes de que se realice ningún trabajo, y comprobar que estas personas muestran documento profesional de la empresa junto con el DNI.

También procurar no estar solo y llamar a algún vecino o familiar si infunden sospechas.

Si aun así, se es víctima de algún delito, hay que llamar de inmediato al 062.