La edición otoñal de la fiesta de Los Amantes arranca con una tibia acogida de público

Con la declaración de amor entre Isabel de Segura y Diego de Marcilla arrancó este viernes por la noche la edición de otoño de la recreación teatral de Los Amantes de Teruel. La escena reunió en torno a la plaza de la Catedral a un público principalmente turolense. Nada que ver con los actos multitudinarios de las Bodas de Isabel, pero demostró que tiene fieles seguidores, que no se cansan de la leyenda que constituye uno de los principales reclamos turísticos de la ciudad.

Este viernes, 16 actores -de los 25 personajes con libreto que darán forma durante este fin de semana a la nueva representación teatral- trasladaron a los espectadores de nuevo al siglo XIII, a un periodo localizado cinco años antes de producirse el desenlace fatal de la muerte por amor de los protagonistas, el hilo conductor, a su vez, de la fiesta de las Bodas de Isabel de Segura.

Fue una escena coral, en la que se alternó el llamamiento del concejo de la villa a los caballeros de Aragón para participar en las cruzadas y los juegos amorosos de Isabel y Diego.

"A lo largo de este fin de semana va a haber momentos espectaculares y creo que todo este montaje tiene una mayor carga emocional que el de las Bodas de Isabel", señaló la gerente de la Fundación que organiza la representación, Raquel Esteban.

Esta fiesta, con la que el sector de la hostelería confía en seguir aprovechando el tirón turístico de Los Amantes en una temporadaya baja de ocupación, no ha arrancado con la expectación de las Bodas de Isabel, pero todos se muestran convencidos de que lo logrará. «Hay que darle tiempo -señalaba el presidente de la Asociación de Empresarios Turísticos, Fernando Cánovas-; esta fiesta todavía no es muy conocida».

Pese a todo, la primera escena reunió en torno a la plaza de la Catedral a un nutrido grupo de personas, y son muchos los que esperan al día de hoy para que se desarrolle al completo la trama. De hecho, será una jornada intensa que comenzará con el pregón de la poeta Teresa Agustín a las once y media y continuará con tres de las escenas más apasionantes. Para Raquel Esteban, esta nueva entrega del drama de Los Amantes, «era necesaria para cerrar el ciclo y, además, ahora es el momento de profundizar en el mito».

El mercado medieval que invade las calles del Centro Histórico y los aledaños del parque de los Fueros, en el Ensanche, se convirtió en un hervidero de gentes cautivadas por los productos artesanos de cerámica o cuero. Estas zonas serán hoy el marco de jóvenes ansiosos por alistarse a las cruzadas, de escribanos, de médicos o judíos prestamistas, que interactuarán en una serie de escenas cruzadas de poca duración.