Eduard Fernández, un carpintero de 33 años residente en Gandesa (Tarragona) y que trabajaba en Valdeltormo, falleció ayer como consecuencia de un accidente de tráfico tras chocar frontalmente su turismo contra un camión que circulaba en sentido contrario. El suceso se produjo a las 6.40 en la carretera N-420 en el término municipal de Mazaleón. Aunque las causas del siniestro se desconocen todavía, todo apunta a que uno de los dos vehículos -aún no se ha determinado cuál- se introdujo parcialmente en el carril contrario provocando el choque. El tramo donde se produjo el accidente, en el kilómetro 768, se encuentra cerca del cruce con esta localidad matarrañense. Incluye una curva suave pero que cuenta con buena visibilidad.

A consecuencia del golpe, el camión, un vehículo frigorífico marca MAN, arrastró al turismo, un Opel Astra, a lo largo de diez metros para, finalmente, quedar ambos cruzados sobre la vía. De esta forma, la Guardia Civil, que se personó de inmediato en el lugar del siniestro, mantuvo cortada la circulación hasta aproximadamente las diez de la mañana, cuando efectivos de Conservación de Carreteras consiguieron arrastrar al camión hasta una de las orillas de la vía y liberar uno de los dos carriles.

Entretanto, una dotación de bomberos de Alcañiz se vio obligada a intervenir para excarcelar el cuerpo sin vida del conductor del turismo, que quedó atrapado entre los hierros. A continuación su cuerpo fue trasladado al tanatorio de Caspe.

El conductor del camión, Facundo S.P., de 45 años, resultó herido leve, y fue atendido por efectivos del 061 en el mismo lugar del siniestro. Se encontraba en el Matarraña completando una ruta de reparto de pescado para una empresa de Vinaròs (Castellón).

Una viaje diario

Eduard Fernández, aunque natural de Arnes (Tarragona), residía en Gandesa con su pareja, con la que tenía planes de boda. Acudía a Valdeltormo todos los días desde hace doce años para trabajar en la carpintería Hermanos Gil Mata de la localidad, negocio que se mantuvo cerrado durante toda la jornada de ayer.

José Miguel Timoneda, alcalde del municipio, indicó que «era un chaval joven al que conocíamos en el pueblo de verlo a diario». Asimismo, explicó que lo normal era que tras su jornada de trabajo regresara a su pueblo. «No solía hacer vida en Valdeltormo, porque cuando terminaba el trabajo por la tarde se iba a casa. Toda su vida la hacía en Gandesa».