TERUEL

La convivencia vecinal, al borde de la ruptura en Torre los Negros

El cierre parcial del Multiservicio por el traslado del bar a otro local divide a la población. Una asociación aglutina a los residentes y visitantes asiduos críticos con el Consistorio

"Es muy triste llegar a esta situación de enfrentamiento vecinal con un centenar de residentes que somos. El ambiente está fastidiado", se lamenta un vecino a las puertas del Multiservicio Rural de Torre los Negros, cerrado desde hace una semana por el Ayuntamiento en contra de la opinión de un sector de la población. A pocos metros una mujer se muestra más beligerante: "La culpa la tiene el ex alcalde. Mientras mandó hizo lo que quiso, pues ahora que deje hacer a los demás". Son dos muestras del ambiente enrarecido que se ha extendido por esta localidad del Jiloca tras las pasadas elecciones locales, en las que la alcaldía se decidió por sorteo. PP y PSOE obtuvieron los mismos votos y el quinto concejal lo eligió el azar.


La última vuelta de tuerca ha sido el cierre -parcial, según el alcalde, Juan José Garcés- del Multiservicio Rural, inaugurado con la anterior Corporación. Una parte de la población fue contraria desde el principio a este establecimiento municipal que aglutina bar, restaurante, tienda, consultorio médico y alojamientos. La animadversión se hizo patente hace dos meses cuando alguien rompió a martillazos la placa conmemorativa de su inauguración.


El anterior alcalde, el socialista Pascual Garcés, dice sentirse "perseguido" por el actual equipo de gobierno, del PP. Ha sido denunciado por el alcalde -primo suyo- por injurias y por la supuesta sustracción de un tablón de anuncios del Multiservicio. La primera fue archivada y la segunda, que sigue su curso, motivó la detención de Pascual para prestar declaración en el cuartel de Monreal. En 2005, fue agredido por una persona que el ex alcalde vincula al entorno del PP. El asunto se zanjó con una multa de 210 euros para el agresor.


A juicio de Pascual Garcés, el "deterioro" de la convivencia se debe a que "el sector caciquil que siempre había gobernado el pueblo no admitió la victoria del PSOE en las elecciones de 2003". Para Pascual, el actual alcalde y los concejales que le apoyan están "obsesionados con deshacer lo que se hizo con el anterior Ayuntamiento".


Juan José Garcés niega que entre las personas que residen permanentemente en el pueblo haya tensiones, aunque admite que "hay problemas con los que vienen los fines de semana y en vacaciones". Las tensiones se remontan, según el alcalde, a la decisión del anterior Ayuntamiento de cerrar el Centro de Convivencia y abrir el Multiservicio Rural. Juan José afirma que muchos vecinos estuvieron en contra de aquella decisión. Lejos de diluirse, aquella semilla de división ha germinado tras las reñidas elecciones locales porque, según el alcalde, el PSOE y sus partidarios "no han asimilado la perdida de la alcaldía mediante un sorteo, que es lo que marca la Ley".


El candidato que se quedó a las puertas de la concejalía al quedar empatado con otro aspirante del PP y perder el sorteo de desempate, Ramón Sebastián, afirma que el PP actúa "sin contar con el pueblo, ni siquiera con los dos concejales del PSOE". Opina que la prioridad del Ayuntamiento ha sido "cerrar el Multiservicio, simplemente porque lo abrió el anterior Consistorio".


El malestar con el Ayuntamiento de un amplio sector de la población se plasmó en la creación de la Asociación de Vecinos "El Horno", formada por 130 personas y que organiza actividades lúdicas y culturales al margen -y en ocasiones en abierta discrepancia- del Consistorio. Juan José Garcés afirma que está siendo manipulada por su antecesor para hace una labor de "oposición". Uno de sus socios sostiene por el contrario que su única pretensión es dinamizar la vida local, pero que se tropiezan con la actitud obstruccionista del alcalde y su entorno.