EMPIEZA LA TEMPORADA DE ESQUÍ

"Es el primer día y no podíamos faltar"

Mientras los esquiadores han empezado con muchas ganas, los hosteleros temen que la crisis se note como la temporada pasada, ¿que fue mala¿.

Los primeros clientes de Panticosa esquiaron muy a gusto y sin aglomeraciones.
"Es el primer día y no podíamos faltar"
LAURA ZAMBORAíN

La temporada no ha podido comenzar mejor para los amantes de este deporte, con buen tiempo y una calidad de nieve "extraordinaria". A esto se suma que la afluencia de gente no fue ayer masiva, por lo que no se formaron colas en los remontes y se pudo disfrutar más de la práctica del esquí. "Hemos disfrutado mucho del día, porque las condiciones han sido muy buenas", aseguró en Panticosa Mikel Rípodas, un esquiador llegado desde Pamplona. La nieve "está muy bien, aunque por la zona de abajo hay menos, y estaban los cañones funcionando", añadió.

Mikel está pasando el fin de semana en la estación con su amigo Ramón Uriz, porque son "habituales". "Venimos siempre que podemos, y hoy (por ayer) no podíamos faltar, porque teníamos muchas ganas de esquiar", explicaron. Además, destacaron el buen trato recibido por parte de los trabajadores del centro.

También hay esquiadores fijos de la estación que tienen un piso o apartamento en Panticosa, como Josu Villalta, de Bilbao, que comenzó la temporada esquiando con su amigo Raúl de Prado. "Está todo muy bien y hemos esquiado muy a gusto", dijeron. Antes de comenzar la jornada "nos hemos acercado a Formigal, a ver cómo estaba el día, pero aquí al estar más protegido, el tiempo ha sido mejor", afirmó Josu, que acude a Panticosa todos los fines de semana que puede e incluso entre semana si el trabajo lo permite, "porque hay muy poca gente y se disfruta el doble". La única pega que sacaron a la jornada fue el precio del forfait. "Podían haber hecho algún descuento por se primer día", añadieron.

Pero mientras los esquiadores piensan en disfrutar 'a tope' de la nieve, los hosteleros lamentan que, como ya ocurrió la temporada pasada, "la cosa no pinta muy bien". Saben que la crisis se va a notar, pero tienen confianza en que la situación mejore. "Hay gente para todo, la que viene con dinero y le da igual comer de restaurante y los que vienen con bocadillo, que son la gran mayoría, y encima se sientan en las terrazas de los bares sin consumir nada, con todo traído de casa", explicó Carlos Rodríguez, propietario de la cafetería Virginia de Astún. Este año, la nueva silla de Truchas "puede ser un atractivo para que venga más gente, pero no hay que olvidar que competimos con Aramón, y además en inferioridad de condiciones", se queja.

Por otra parte, Manuel Torres Gómez, camarero del bar Tito Paco, también de Astún, se mostró más optimista, porque este año "la nieve ha venido pronto y eso es algo muy positivo". Recordó que la temporada pasada fue mala, "porque entre semana viene muy poca gente, y para los puentes y vacaciones hizo muy mal tiempo, ese fue uno de los problemas". Reconoce que la crisis se notará, " por eso no hemos subido los precios", pero también confía en que el balance final sean "mejor".