Clases con más estudiantes de los aconsejables, problemas de adaptación en el caso del alumnado inmigrante y un déficit importante en las plantillas de profesores. Así resume Gema Tomás, profesora de PCPI (Programas de Cualificación Profesional Inicial), la antigua Garantía Social, la situación actual del sector educativo en Aragón.

“En nuestra comunidad hay una falta de motivación importante con respecto al profesorado. Los incentivos económicos son menores que en otras regiones como Navarra, a cuyas oposiciones concurren muchos profesores aragoneses”, apunta Tomás.

En estos momentos, en Aragón hay más de 15.000 profesores en plantilla que tienen que atender a un número de alumnos cada vez mayor (198.169 matriculados en el curso 2009). “En numerosos centros se supera la ratio, que es de 15 alumnos máximo en los PCPI, hasta 30 en la ESO, 25 en infantil y una media de 30 en el resto de los ciclos”, afirma.

La falta de una atención más especializada para cubrir las necesidades de los alumnos inmigrantes es otro de los talones de Aquiles del sistema educativo aragonés.