La sequía puede provocar problemas de suministro en 184 núcleos aragoneses

La fortísima sequía que padece la cuenca del Ebro desde mayo del año pasado puede provocar problemas de suministro en 184 núcleos aragoneses, según los cálculos del Departamento de Medio Ambiente de la DGA. Consciente de que la Comunidad se enfrenta a un periodo de escasez que está batiendo registros históricos ya durante el invierno, la Consejería que dirige Alfredo Boné ha estudiado la situación de todos los abastecimientos urbanos para ver cuáles pueden verse afectados por la falta de agua especialmente en los meses de verano.

De esos 184 asentamientos, 94 corresponden a la provincia de Huesca, 52 están en Teruel y 38, en Zaragoza. Muchos de ellos son pedanías de pocos habitantes, pero en el listado que maneja el Gobierno de Aragón también hay grandes municipios como Teruel, Calatayud, Monzón o Calamocha.

Según aclararon fuentes de Medio Ambiente, esto no significa que esas grandes poblaciones vayan a quedarse sin agua, pero sí que actualmente presentan carencias en sus redes de abastecimiento que pueden verse agravadas por la sequía. Teruel, por ejemplo, necesita un nuevo depósito de 6.000 metros cúbicos, Monzón requiere una mejora en el abastecimiento de agua de boca de Selgua y Calatayud pide una reforma de la planta potabilizadora.

"El listado de núcleos que pueden sufrir carencias se ha elaborado a partir de la información sobre abastecimientos que tiene el Instituto Aragonés del Agua y con las peticiones de agua que los Ayuntamientos afectados han tramitado en los últimos años ante las diputaciones provinciales y las comarcas -explicaron desde el Departamento-. Durante la sequía de 2005 se calculó que había unos 250 asentamientos con problemas, pero desde entonces las obras de mejora que se han ido ejecutando han reducido esa cifra en una cuarta parte". Esos trabajos se llevan a cabo con cargo al Plan del Agua, que invierte unos 25 millones de euros cada año.

En cuanto a las necesidades que aún no han sido atendidas, la Consejería de Medio Ambiente estima que para garantizar un abastecimiento sin problemas a todos los núcleos habitados de Aragón hacen falta actuaciones por valor de unos 70 millones de euros. Sus responsables esperan que el Gobierno central asuma parte de esos costes, una reivindicación que ya fue planteada hace dos años sin apenas éxito.

Implicación del Ministerio

En plena sequía de 2006, el consejero Boné remitió una carta a Cristina Narbona pidiéndole la ejecución de las obras necesarias para evitar problemas de suministro. Sin embargo, por aquellas fechas el Ministerio solo aprobó tres obras de emergencia: la traída de aguas a Huesca desde la presa de Montearagón, la conexión del Canal de Aragón y Cataluña con el de Piñana para aliviar la situación de los pantanos del Noguera Ribagorzana y la reparación del embalse de San Bartolomé, en Ejea de los Caballeros. Fuentes del Departamento de Boné señalaron que en la reunión de ayer de la comisión mixta Ministerio de Medio Ambiente-Gobierno de Aragón la DGA planteó la posibilidad de crear un plan director para garantizar los abastecimientos durante la sequía en el que las distintas Administraciones se repartan las obras que deban ejecutarse.

Incluirlas en un nuevo decreto

"Otra de las cuestiones que pide el consejero Boné es que dentro del decreto de emergencia contra la sequía que va a aprobar el Consejo de Ministros se incluyan algunas de esas actuaciones necesarias en la Comunidad", añadieron las mismas fuentes.

Por su parte, el número dos del Ministerio de Medio Ambiente, Antonio Serrano, se limitó a decir, antes de la comisión mixta, que la Confederación Hidrográfica del Ebro está estudiando la situación para ver qué soluciones son las más adecuadas en cada caso y decidir si es necesario plantear obras de emergencia. El secretario general para el Territorio y la Biodiversidad recordó, no obstante, que cuando en 2005 fue necesario garantizar el abastecimiento a la ciudad de Huesca se hico "con éxito".

Serrano y los trasvases

Preguntado por una propuesta del Colegio de Ingenieros Industriales de Cataluña de hacer un triple trasvase a Barcelona desde el Ebro, el Ródano y el Segre, Serrano opinó que solucionar el problema de la sequía "no es cuestión de dar ideas geniales", sino de estudiar con rigor los pros y los contras de las distintas alternativas para luego tomar la decisión más adecuada. "No se puede descartar ninguna", afirmó no obstante el número dos de Narbona, quien justificó esas palabras reiterando que hay que analizar en profundidad todas las opciones para elegir "la mejor".