El Ayuntamiento pide al juez el desalojo de los okupas del edificio del Wilson, en Huesca
Está a la espera de la decisión judicial para intervenir en el inmueble de la calle San Orencio, en el centro de la ciudad y donde hay que hacer trabajos de consolidación no acometidos por la propiedad.
El Ayuntamiento de Huesca está pendiente de una orden judicial de desalojo que permita ejecutar subsidiariamente obras de consolidación de algunos elementos de los edificios números 14 y 16 de la calle de San Orencio; este último es conocido como edificio del Wilson por el bar que hasta hace unos meses estaba abierto en la planta calle.
El gobierno local ha manifestado su preocupación por la situación de este inmueble okupado y los problemas que genera. Los servicios sociales intervinieron en este caso y emitieron un informe que pasó a la Fiscalía de Menores.
Además, el pasado mes de junio, la Alcaldía emitió un decreto de realización subsidiaria de obras de mantenimiento en el inmueble. La situación de okupación impide al Ayuntamiento intervenir hasta que no haya una resolución judicial.
El pasado 19 de abril, técnicos del área de Urbanismo realizaron una visita de inspección a los inmuebles. Tras el informe emitido, el Ayuntamiento ordenó a la propiedad que acometiera trabajos de consolidación de varios elementos que presentaban riesgo. Se le dio un plazo de 15 días.
Visto que no se había cumplido el requerimiento, ya el nuevo gobierno municipal ordenó la ejecución inmediata de los trabajos a cargo de las arcas municipales. Después, como se hace en este tipo de procedimientos, se cargará el importe a la propiedad. La inspección de la planta primera del número 16 no pudo completarse precisamente por encontrarse ocupada ilegalmente.
Los técnicos determinaron la existencia de humedades y filtraciones, grietas en falsos techos, desprendimientos en enlucidos y presencia de escombros en la estructura bajo cubierta. Además, en el número 16 advirtieron de problemas de estabilidad en la escalera.
El Ayuntamiento requirió a la propiedad el desalojo de las viviendas ocupadas, la prohibición de uso del callejón contiguo y la realización de catas para conocer el estado de la estructura del número 16. En el caso del número 14, se comprobó que los cimientos no suponen riesgos y se ordenó a los dueños que hicieran catas en el forjado del techo del antiguo Bar Wilson, el apeo de la escalera para asegurar su estabilidad, el apoyo de un dintel de balcón con vistas al callejón de la Botería así como la reducción de cargas sobre los forjados y todos aquellos elementos que presentan riesgo de desprendimiento. También se solicitó la retirada general de escombros y la colocación de mallas o redes para evitar la entrada de aves.
Todos estos trabajos serán ejecutados por el consistorio de manera subsidiaria en el momento en el que la autoridad judicial dé orden de desalojo y se pueda acceder a la finca.
Además, se requirió a la propiedad que someta los edificios a la correspondiente ITE (Inspección Técnica de Edificaciones), que debe pasar todo edificio de más de 50 años de antigüedad).
