Fervor en Huesca por el Cristo de los Gitanos a las puertas de la catedral
La procesión se incorporó al programa hace 14 años de la mano de la última cofradía creada en Huesca.
Huesca vibró la noche del domingo con una de sus procesión más singulares, incorporada al programa hace solo 14 años, la del Cristo de los Gitanos. Esta cofradía se encarga de sacar una figura de Jesús que anteriormente se exhibía en el retablo del convento de Santa Clara. El acto religioso tiene un gran tirón popular y numeroso público arropó a los cofrades, pese al viento y las bajas temperaturas, cuando a las 22.00 procedieron a sacar la peana de la catedral. La plaza estaba a rebosar cuando la imagen cruzó las puertas.
Portada a hombros por la cofradía del Santo Cristo de los Gitanos, el paso se paseó por los rincones más emblemáticos del casco viejo: la plaza de los Fueros, la calle de las Cortes o la de Desengaño, hasta volver otra vez al recinto catedralicio.
La cofradía se fundó en 2007, aunque no pudo salir con un paso hasta dos años después. Solo se ha incorporado posteriormente al programa otra procesión, la del Resucitado, auspiciada por el obispo Julián Ruiz cuando se hizo cargo de la diócesis de Huesca, que organiza la Archicofradía de la Santísima Vera Cruz en colaboran con el resto.
Antes de procesionar el Cristo de los Gitanos, por la mañana, la Semana Santa de Huesca se abrió con el desfile del Domingo de Ramos. Si la primera la organiza la cofradía más nueva, esta queda en manos de la más antigua de la ciudad, la de San José y Santa Ana, cuyo origen se remonta a 1551. Cientos de personas salieron a la calle para ver el paso de la Entrada de Jesús en Jerusalén acompañado de las palmas, bendecidas en la catedral.
Como en el resto de procesiones de Huesca, contó con una representación de las 14 cofradías con sus estandartes. A las 11.00 salió de la catedral, encabezada por el obispo, para completar un itinerario que la volvió a llevar a la seo tras recorrer las calles y plazas de Santiago, Pedro IV, Lizana, Coso Alto, López Allué, San Pedro, San Salvador o las Cortes. Uno de los elementos más característicos que acompañan el paso es el coro de hebreos, niños y niñas del colegio de Santa Ana que cantan a lo largo del desfile. El sonido lo puso también la banda de tambores y bombos del Cristo del Perdón como invitados.
Hoy, lunes, saldrá la procesión del Cenáculo, a las 21.00, desde la parroquia de María Auxiliadora, organizada por la cofradía Salesiana del Santo Cáliz, que tiene su germen en la Asociación de Antiguos Alumnos. En 1955 fue invitada a participar acompañando la imagen de Jesús rodeado de sus apóstoles en el momento de celebrar la Última Cena. Previamente, a las 20.00, se celebrará la Misa del Cofrade.
Y a las 23.00 tiene lugar la procesión del Prendimiento, con la cofradía del mismo nombre, que partirá desde la iglesia de Santo Domingo y San Martín y en la que colabora la Asociación de Vecinos Juan de Lanuza.
