folklore
Jaca revive en una exposición fotográfica las 51 ediciones del Festival Folklórico de los Pirineos
El principal motivo de esta muestra ha sido homenajear al compositor del himno de este certamen, Tomás Asiáin, así como a Luis Ascaso, que ha cedido al ayuntamiento el cartel original de la primera edición de 1963.
El Festival Folklórico de los Pirineos de Jaca ha hecho historia a lo largo de sus 51 ediciones. Han sido muchos los grupos de todo el mundo los que han actuado en los diferentes escenarios, pasacalles o desfiles. Y toda esa multiculturalidad, colorido y gran ambiente que se vive en la capital jacetana durante el festival, se puede revivir gracias a dos exposiciones fotográficas que se ubican en el hall del ayuntamiento. El motivo de estas muestras era homenajear a dos personas: Luis Ascaso, que ha cedido el cartel original de la primera edición, la de 1963, y a Tomás Asiaín, el compositor del himno del certamen, ‘Yo también iré a Jaca…’.
La cesión del cartel, cuyo original ya se encuentra en el archivo municipal, es "desinteresada para nuestro patrimonio cultural", ha señalado la concejal Olvido Moratinos. Y respecto al himno, ha destacado que es el hilo conductor de todos los festivales, “el comienzo y final de todas las actuaciones y todos los eventos. Es un emblema y va a estar siempre en nuestro recuerdo”.
El hijo de Tomás Asiáin, Jesús, ha sido el encargado de recibir el detalle que el consistorio jaqués ha querido entregarle para reconocer la labor cultural del músico navarro en la localidad.
Además de crear el himno, también fundó el Orfeón Jacetano y el ayuntamiento le concedió el Sueldo Jaqués en 1975. Jesús Asiáin ha agradecido el homenaje, recordando que su padre “era navarro, tudelano hasta la médula, pero su llegada a Jaca en 1961 marcó su vida como músico, compositor y persona”. Hasta el año 81 “no paró de desarrollar cosas tan importantes como ponerle música a la peña Oroel y compuso algo tan importante en su momento, como fue el himno de un festival naciente en aquellos años, que ha perdurado en el tiempo”.
Respecto a las exposiciones, la primera es una retrospectiva de las 50 ediciones del Festival Folklórico de los Pirineos, que se pudo disfrutar en la edición del año pasado en los escaparates de comercios, bares y restaurantes, y a la que se han incorporado 5 imágenes de la edición de 2021, “de transición porque fue sólo con grupos locales, más reducida y con medidas Covid”, ha recordado Moratinos. En esta muestra se pueden contemplar imágenes desde la primera edición, la de 1963, hasta el último, y se puede comprobar la evolución del certamen.
Por otro lado, en la entrada accesible del ayuntamiento hay 40 fotos seleccionadas por el Círculo Fotográfico de Jaca, correspondientes al concurso de la 50 edición, la de 2019. Esa fue “la última de verdad, y una de las mejores de todos los años de historia del festival”, ha asegurado la concejal. En esa edición “vimos el color, el ambiente de las calles, recuperamos el desfile inaugural y el desfile final congregó a 60.000 personas de público”. Según Moratinos, “esa tiene que ser la imagen con la que nos tenemos que quedar y la que nos de impulso para la edición de 2022”.
