Localizan herida a una mujer de Azanuy que desapareció el domingo tras salir en bicicleta

Quedó inmovilizada por una caída y no llevaba móvil. Un hombre la encontró ayer en un camino junto a su perro

Familia y amigos ya habían hecho una búsqueda y ayer a las 14.30 se organizó un dispositivo con guardias civiles, Policía Judicial, forestales, bomberos, patrullas de Seguridad Ciudadana de Barbastro y del Seprona de Monzón y de Graus y vecinos de Azanuy.
Localizan herida a una mujer de Azanuy que desapareció el domingo tras salir en bicicleta
Concha Silván

María Jesús Monter, que pasaba el fin de semana en su casa familiar de Azanuy, apareció herida en un camino del término de Almunia de San Juan a primera hora de la tarde de ayer tras permanecer desaparecida alrededor de 27 horas. Un vecino de Almunia que circulaba por el camino de la torre Ric, sobre las 15.30 de ayer, de forma casual, vio a la mujer herida junto al camino, la socorrió y se encargó de llamar a las asistencias médicas.


La mujer, de 51 años, a la cual estaban buscando desde el domingo familiares y convecinos, fue trasladada al hospital de Barbastro, donde permanece ingresada en la planta de Traumatología, con signos de deshidratación y una posible fractura de cadera, consecuencia de la caída que sufrió cuando paseaba con su bicicleta y su perro, algo que la mujer hacía a menudo, ya que, según cuentan quienes la conocen, es muy aficionada a las dos ruedas, sobre las que recorre grandes distancias. 


Según fuentes cercanas a Monter, esta se cayó de forma fortuita de la bicicleta y quedó herida en la cuneta del camino, accidente del que no pudo dar aviso porque, habitualmente, no llevaba teléfono móvil cuando hacía sus excursiones en bicicleta. 

Durante las horas que pasó en el lugar del accidente, María Jesús contó con la compañía de su perro, ‘Maki’, que dio calor a su dueña en la fría noche, ya que cayeron en la zona entre 8 y 12 litros por metro cuadrado. En el momento en que los halló el vecino de Almunia, cuando se dirigía a sus fincas, la mujer mostraba síntomas de deshidratación, así como su mascota, a la que sí dejaron saciar su sed. 


A la misma hora en que era localizada María Jesús, acababan de salir en su búsqueda las patrullas del dispositivo que organizó la Guardia Civil con los vecinos, familiares y otros voluntarios, que ya habían hecho batidas el domingo, día de la desaparición, y ayer lunes por la mañana, aunque de forma no organizada. Volcados en la búsqueda 

En el dispositivo, que coordinó el teniente jefe accidental de la Compañía de la Guardia Civil de Barbastro, participaron el comandante de puesto de Monzón, tres guardias civiles, Policía Judicial, dos forestales, dos bomberos, patrullas de Seguridad Ciudadana de Barbastro y del Seprona de Monzón y de Graus, además de medio centenar de vecinos de Azanuy, que se volcaron en la búsqueda, tal como destacó ayer el alcalde de la localidad, Enrique Blanch. 


La víctima del accidente fue vista por última vez sobre las 12.00 del domingo en la plaza Mayor de Azanuy, con su bicicleta. La alarma la dio su familia cuando pasada la hora de la comida María Jesús no aparecía. Buscaron por los caminos que solía frecuentar, tarea a la que se incorporó la Guardia Civil y algunos vecinos que recorrieron caminos que parten de Azanuy hacia Alins del Monte, Baells, Cuatrecorz, Peralta de la Sal y otros, aunque no llegaron hasta Almunia de San Juan, ya que la mujer estaba a unos 7 u 8 kilómetros de Azanuy. 


La población de esta localidad literana se volcó en el rescate de María Jesús, que aunque reside en Barcelona, donde es profesora de Secundaria y Bachillerato, recalaba en el pueblo casi cada fin de semana por su amor a la naturaleza y porque allí vive su madre, cuentan sus conocidos. Vecinos de todas las edades respondieron a la llamada realizada desde el Ayuntamiento para participar en la búsqueda de Monter. 


Felizmente, la mujer pudo ser rescatada sin que su vida corra peligro, disipando las dudas que sobre su suerte atenazaban a sus familiares y amigos.