CASA HEREDIA DE GRAUS

La visión femenina de Peña Marín

La artista grausina expone una serie de cuadros de gran tamaño y de piezas escultóricas, en los que profundiza en el análisis de la mujer y su entorno.

La artista grausina, Peña Marín, en la Casa Heredia junto a sus obras.
La visión femenina de Peña Marín
ÁNGEL GAYúBAR

La artista grausina Peña Marín expone hasta el próximo día 14 de agosto en la Sala de Exposiciones de la sede de la Comarca de La Ribagorza, en la Casa Heredia de Graus, sus últimos trabajos, una serie de cuadros de gran tamaño y de piezas escultóricas, en los que profundiza en el análisis de la mujer y su entorno. «Es una mirada a la vez reivindicativa y sensible en una serie que habla de muchas cosas, sin apenas hablar, invitando al espectador a que sienta, reflexione y disfrute del color, del calor, del amor y, por qué no, del desamor, de la alegría, de la pena? y donde, por encima de todo, se habla de la MUJER con mayúsculas» explica la artista reconociendo que este trabajo, «desde una posición un tanto "feminista", pero sin hablar de feminismo y algo influenciada por la obra de Guerrilla Girls», trata de reflejar el mundo «equilibrista» en que viven las mujeres.


La serie de obras expuestas en Casa Heredia trata temas a veces desagradables y a veces amables, y quizá en ciertos momentos -como reconoce la propia artista- tópicos, pero Marín invita al espectador en esta muestra artística a dar la vuelta a lo que ve, «a buscar la doble lectura, la reflexión, ya que las obras hablan de mujeres fuertes y continuamente resurgiendo». «Como mujer quiero valorarnos en este caótico mundo que lucha entre la aceptación asumida y la brutalidad heredada y parto en mis trabajos de una idea perenne en mi vida, la del artista como un ser privilegiado que tiene la posibilidad de expresar y transmitir lo que piensa y siente», apunta la artista que son muchos los temas que, en su opinión, merecen ser tratados «desde la ablación hasta las señoras de la limpieza, pasando por la anorexia que ya se plantea en Fashion Burka». Temas todos ellos implícitos o explícitos en esta serie de trabajos que conforman la exposición que se puede ver estos días en Graus «pero siempre tratados con sutileza, dignificando sobre todo a sus protagonistas» ya que la autora considera que todas ellas «son mujeres, son princesas, son bellas, y aunque algunos se empeñen en lo contrario, lo seguirán siendo por encima de cualquier otra cosa».


Amante de la moda y con un concepto de creación entre la fotografía, el diseño gráfico y la era digital, la artista utiliza en buena parte de sus obras una técnica mixta en la que mezcla la fotografía con la serigrafía y la pintura para lograr unos resultados a veces inquietantes y siempre sorprendentes. Marín comenta que concibe una obra «a caballo entre la pasarela, las campañas publicitarias, el cine, y la defensa a ultranza de los derechos y libertades de las mujeres, y en general de los sectores desfavorecidos». En el plano estilístico, reconoce múltiples influencias en esta serie de trabajos. «Buscando esa magia y elegancia, quieren recordar a obras maestras del renacimiento y del barroco, todas esas Venus vertiginosamente colocadas, o esos jardines del Columpio de Fragonard, esos encuadres imposibles que también admiro del arte gráfico japonés, la sutileza de las geishas, la concreción de sus haikus o la genialidad de los grabados de Hiroshige».


Pese a su juventud, la creadora grausina cuenta con una dilatada trayectoria a sus espaldas y ha recibido numerosos galardones y reconocimientos por sus propuestas artísticas. Es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Barcelona y en Historia del Arte por la Universidad de Zaragoza y artífice de una singular obra artística que bucea en diferentes técnicas y formatos.