JACETANIA

La DGA destina 4,8 millones a mejorar la A-2605, en los accesos a Jasa y Aragüés

La calzada se ensanchará hasta 6,5 metros y se tomarán medidas para evitar desprendimientos.

Los vecinos de Jasa y de Aragüés del Puerto, en la comarca de la Jacetania, van a ver cumplida por fin una de sus principales reivindicaciones, la mejora y ensanchamiento de la carretera que da acceso a ambas localidades, que actualmente presenta graves problemas de seguridad vial por la estrechez de algunos tramos y por los numerosos baches que salpican la calzada.

El Consejo de Gobierno de la DGA aprobó ayer las obras de acondicionamiento de esta carretera A-2605, entre los kilómetros 34,6 y 40,7 (de la intersección de la A-176 a Jasa), y el primer kilómetro y medio del acceso a Aragüés. Los trabajos en estos 7,4 kilómetros de longitud saldrán a licitación con un presupuesto de 4,8 millones de euros y un plazo de ejecución de 14 meses.

Según informaron ayer fuentes del departamento de Obras Públicas del Gobierno de Aragón, con este proyecto, la calzada pasará a tener 6 metros de ancho más 0,25 metros cada uno de los arcenes. La velocidad mínima en gran parte de la carretera será de 60 kilómetros por hora, aunque habrá dos tramos críticos (kilómetros 1,415-1,505 y 2,250) donde se rebaje a 30 por hora. En estos puntos se construirá un voladizo y se llevará a cabo un desmonte en la roca, respectivamente, para evitar desprendimientos como los que en 2004 provocaron el hundimiento de un tramo de 25 metros.

El proyecto recibió en el mes de octubre del año pasado el visto bueno del Instituto Aragonés de Gestión Ambiental al considerar que "es de reducidas dimensiones ya que se ajusta a una infraestructura existente y minimiza los impactos".

Difícil cruce de dos coches

El alcalde de Jasa, José María Miranda, no ocultó ayer su satisfacción al conocer la aprobación del proyecto por parte del Gobierno de Aragón. Explicó que la carretera en la que se va a actuar, que discurre por un terreno accidentado en la margen del río Osia, tiene algunos tramos donde apenas pueden cruzarse dos vehículos a la vez ya que el ancho no llega a los 5 metros, y además tiene curvas muy cerradas. "Se hizo hace 70 ú 80 años y ahora el asfalto está lleno de boquetes y vas botando con el coche todo el rato", señaló.

Miranda reconoció que lleva dos mandatos esperando la mejora de la carretera. "La esperábamos como agua de mayo porque es la obra que más urge en todo el valle ya que es la única carretera que queda en mal estado de todos estos alrededores", subrayó.