AYUNTAMIENTO

La crisis y el plan de saneamiento marcarán la pugna por una corporación de 25 concejales

Luis Felipe (PSOE) dispone de ocho meses para demostrar su valía como alcalde de Huesca y como candidato.

El salón de plenos durante la sesión celebrada a principios de agosto, primera presidida por Luis Felipe.
La crisis y el plan de saneamiento marcarán la pugna por una corporación de 25 concejales
J. B.

El curso político que cierra el mandato municipal se presenta en Huesca bajo el signo del cambio. Ocurra lo que ocurra en las elecciones de 2011, el ayuntamiento oscense iniciará un nuevo ciclo y no solo porque en el salón de plenos se sentarán cuatro nuevos concejales al superar el censo los 50.000 residentes sino porque se pondrá fin a una etapa que inició en 1999, cuando el socialista Fernando Elboj accedió a la Alcaldía.


Tras once años al frente del gobierno municipal, Elboj dio paso al que será su sucesor en la candidatura del PSOE, Luis Felipe. El partido todavía no lo ha confirmado oficialmente, pero está claro que el actual alcalde cuenta con la confianza necesaria. Felipe, que se puso al frente de la coalición PSOE-PAR a principios de julio, dispone de ocho meses para ganarse al electorado y recuperar el terreno que su antecesor perdió en las elecciones de 2007, cuando un descenso de 3.000 votos quitó al PSOE la mayoría absoluta conseguida en 2003 y lo dejó con 9 de 21 ediles.


Felipe encara su ejercicio como alcalde consciente de que no está en el escenario más propicio. El desgaste del partido y la crisis económica no son las mejores bazas para un año electoral, un año en el que, además, hay que completar el plan de saneamiento al que las arcas municipales están sometidas desde 2007 por haber perdido el equilibrio presupuestario al pedir un crédito de 4,5 millones para financiar la construcción del Palacio de Congresos.


Asuntos pendientes

Le resta también Luis Felipe ultimar los asuntos que dejó Elboj en cartera como la recuperación del dinero del convenio de las travesías. Se trata de saber si los 1,8 millones que no se han recibido porque no se han ejecutado las obras en la avenida de Ramón y Cajal (antigua travesía de la N-240) están aún disponibles en Fomento. También hay que determinar si la franja de suelo frente al hospital de San Jorge que impidió el ensanchamiento de la calzada pertenece a la administración central o al ayuntamiento. Con Fomento hay que aclarar asimismo qué va a pasar con el terreno de la antigua vía del tren a su paso por el casco urbano. Otro asunto por resolver es la construcción de la rotonda de Coso Real, pagada desde hace años por los propietarios del centro comercial, y sin hacer.


Luis Felipe asegura que este año "se cumplirán los compromisos existentes y no se crearán otros nuevos". Tampoco habrá dinero para embarcarse en nuevos proyectos porque parece que, al contrario que en los dos últimos ejercicios, no habrá un Plan E que permita disimular la falta de fondos municipales incluso para obras de mantenimiento.


En este marco, dentro de unas semanas empezará el debate las ordenanzas fiscales, "que serán adecuadas a una realidad socioeconómica de regresión o de crisis", apunta Felipe. Él sabe que será un año duro y que tras el paréntesis del verano con el que se ha visto favorecida su llegada a la Alcaldía comenzará una carrera en la que todos los grupos quieren alcanzar una buena posición. No obstante, la pugna por un ayuntamiento que pasará de 21 a 25 concejales se presenta como la liga de fútbol, como cosa de dos.


El Partido Popular quiere asegurar opciones en un curso político que la portavoz, Ana Alós, califica como "de transición". "En estos meses se va a culminar una gestión que a nuestro entender no es satisfactoria", señala. Alós todavía no ha sido confirmada como candidata a la Alcaldía de Huesca por el PP, pero no hay dudas de que el partido reconocerá su trabajo en la portavocía, que asumió en 2008 tras la marcha de Bermúdez de Castro al Senado. Los populares esperan conseguir en 2011 el despegue que empezó a atisbarse en 2007, cuando se logró pasar de 6 a 7 concejales. Son muchas las circunstancias, directas e indirectas, que lo favorecen.


Un espacio justo

Felipe y Alós protagonizarán esta cuenta atrás hasta las municipales dejando un espacio más que justo para el resto de las formaciones políticas. El PAR tratará de rentabilizar su labor como socio de gobierno para que no ocurra como en 2004, cuando, tras formar coalición con PSOE e IU, los aragonesistas perdieron dos de los tres concejales. Fernando Lafuente liderará la lista. Al frente de CHA estará Luis Gállego, actual edil, que ya ha sido confirmado como sucesor de su compañero de grupo, Miguel Solana. Pilar Novales será la candidata de IU. Y no hay que olvidar a Los Verdes.