MONTAÑA

Más de diez horas de rescate para auxiliar a una pareja extraviada en Monte Perdido

Las bajas temperaturas les provocaron congelaciones y además uno de ellos sufrió una caída.

Después de más de diez horas y en condiciones meteorológicas muy adversas, el grupo de rescate de la Guardia Civil de Boltaña consiguió ayer localizar y evacuar a dos montañeros que se habían extraviado en el Parque Nacional de Ordesa cuando intentaban coronar Monte Perdido. Ambos presentaban síntomas de hipotermia, debido a las bajas temperaturas que soportaron durante la noche en la que hicieron vivac, y además, uno de ellos había sufrido una caída que le impedía andar y que obligó a los guardias a evacuarlo en camilla hasta el refugio de montaña de Goriz.

La pareja había salido la tarde del sábado con intención de coronar Monte Perdido, pero se habían extraviado y hecho un vivac a más de 2.900 metros de altitud. Sin embargo, la lluvia, la ventisca y las bajas temperaturas que se registraron en la zona durante la madrugada de ayer domingo (poco más de cero grados) les ocasionaron muchos problemas. La mujer, I. S. P. Q., de 29 años y vecina de Madrid, dio a primera hora de la mañana -sobre las 8.00- la voz de alarma gracias al teléfono móvil que portaba. No obstante su acompañante, J. M. H. R., de 40 años y vecino de Pamplona, ya había partido con las primeras luces del alba hacia el refugio de montaña de Goriz también para pedir auxilio.

Los agentes de montaña, un médico del 061 y el helicóptero del cuerpo se pusieron en marcha enseguida. Pero antes de partir, los especialistas de la Guardia Civil decidieron llamar también al citado refugio de montaña, que dispone de un teléfono satélite, para relatar lo sucedido. Es por eso que uno de los guardas del albergue salió hacia Monte Perdido en su busca y consiguió localizar al hombre, que había sufrido un accidente y que presentaba diversas heridas cortantes en cara y manos.

Más de 60 nudos de viento

Los más de 60 nudos de viento complicaron las tareas del helicóptero, que finalmente dejó a los agentes y el médico en el refugio de Góriz, a más de hora y media de donde el guarda había localizado al montañero herido. A partir de ahí, los tres agentes y el médico subieron a pie. Atendieron al hombre, que también sufría síntomas de congelación en las manos e hipotermia, lo acomodaron en una camilla y lo bajaron hasta el lugar donde el helicóptero había podido aterrizar.

Gracias a las coordenadas del GPS que la mujer había facilitado, esta fue localizada por los componentes del equipo de rescate a unos 2.900 metros de altitud. También presentaba, según informó la Subdelegación en una nota, síntomas de hipotermia, aunque estos no le impedían andar. Ayudada por los socorristas, realizó el descenso hasta el refugio de Góriz, al que llevó cerca de las tres de la tarde. Desde ahí, ambos fueron evacuados con el helicóptero. Ella, hasta Boltaña, mientras que su compañero, que presentaba síntomas de congelación y heridas de diversa índole, fue trasladado al Hospital San Jorge de Huesca.