HUESCA

Los 264 millones de inversión de Fomento en la provincia, pendientes de los recortes

El Ministerio tiene poco margen de maniobra, si no quiere retrasar las obras del eje Pamplona-Huesca-Lérida.Los empresarios de la Jacetania temen demoras en tramos por adjudicar en la A-21.

Obras de la autovía en el puerto de Monrepós.
Los 264 millones de inversión de Fomento en la provincia, pendientes de los recortes
JAVIER BLASCO

El mapa de inversiones está en el aire. El reajuste presupuestario de 6.045 millones de euros entre 2010 y 2011, fundamentalmente en infraestructuras de Fomento, obligará a hacer retoques en el paquete de 264 millones de euros presupuestados este año por ese ministerio para la provincia de Huesca.

De momento nadie sabe por dónde se meterá la tijera, aunque el PSOE descarta la paralización de obras ya iniciadas y cree más factible que el ahorro venga por una "reprogramación" de plazos de ejecución. Otra cosa son los proyectos que aún están solo en papel, como el embalse de Biscarrués, una parte del Eje Pirenaico (N-260) o la A-14 (Lérida-túnel de Viella), donde solo se ha iniciado un tramo en la parte catalana.

Ahora mismo la principal pregunta es si afectará a las autovías A-21, A-22 y A-23, en el Eje Cantábrico-Mediterráneo, que concentran tres cuartas partes de la inversión de Fomento en la provincia para 2010, casi 200 millones de euros. Solo la Nueno-Jaca tiene un gasto de 105 millones; seguida de la Huesca-Lérida, con 78; y la Jaca-Pamplona, con 17, la más sensible a los ajustes porque hay tramos por adjudicar.

Otras inversiones son el desdoblamiento de la N-II de Fraga a Alfajarín o a la variante sur de Huesca, con partidas simbólicas que no contemplan el inicio de las obras en este ejercicio y que también podrían quedar relegadas. No parece que haya mucho margen para recortar en los 16 millones previstos en los tramos en obras del Eje Transpirenaico (N-260), un proyecto que arrastra un retraso histórico.

Inquietud por la A-21

Los responsables socialistas de la provincia no disponen de datos concretos sobre cómo se aplicará el ajuste, pero descartan que la autovía se vea afectada de forma importante. En la A-22 (Huesca-Lérida) están todos los tramos abiertos o en obras, excepto el de Huesca a Siétamo, y de hecho Fomento prevé que este año se pueda abrir el 80% del recorrido. Y entre Huesca y Jaca (A-23) las máquinas también están trabajando. No es el caso de la A-21, de Jaca a Pamplona, donde todavía hay cinco tramos sin obras, en distintas fases administrativas, y por lo tanto más susceptibles de sufrir alguna modificación.

Los empresarios de la Jacetania han expresado su temor a que el ajuste se cebe con estos tramos. "Si se recorta será en obras no iniciadas. Ahora que parecía que en Monrepós las cosas funcionaban, y en el cruce de Guasa (de Jaca a Sabiñánigo) hay mucho movimiento de máquinas...", lamentó Cristóbal Sánchez, presidente de la Asociación de Empresarios de la Jacetania.

Dudas sobre Biscarrués

El otro gran paquete inversor, 115 millones de euros, corresponde al Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, junto con sus empresas públicas Seiasa del Noreste y Acuaebro. Sin embargo, todas las fuentes consultadas rechazan que se vayan a producir ajustes en las obras hidráulicas programadas porque los propios usuarios participan en su financiación.

Las mayores partidas se refieren a la modernización de zonas regables y al embalse de San Salvador. Solo esta obra tiene un gasto este año de 25 millones de euros. El presidente del Canal de Aragón y Cataluña, José Luis Pérez, se muestra cauto hasta no tener más información. "Entendemos que no habrá problemas, pero hay que esperar".

Respecto al embalse de Biscarrués, el recorte difícilmente puede afectarle este año, pues está pendiente de la declaración de impacto ambiental y con una partida simbólica introducida por la vía de enmienda, por lo que no habrá obras este año. Otra cosa es lo que pueda pasar en el futuro.