Huesca. Aunque el argumento de que Francia no tiene interés en el proyecto de la Travesía Central Pirenaica se escucha reiteradamente desde España, el alcalde de Tarbes, Gerard Trémège, resaltó la necesidad de construir la línea férrea de alta capacidad. El político galo aprovechó su intervención en el acto de entrega de la Parrilla de Oro de Huesca, poco antes del chupinazo que dio inicio a las fiestas de San Lorenzo, para apuntar que el desarrollo de Francia y España pasa por la construcción del túnel. Marcelino Iglesias y el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, recogieron el guante y prometieron darle un impulso a la Travesía Central Pirenaica durante la presidencia española de la UE.

En la reunión, que ya se anunció que se celebrará en Zaragoza durante el primer semestre de 2010, se abordará todo el proceso de revisión de las redes transeuropeas. Morlán concretó ayer que el encuentro, en el que participarán todos los ministros de obras públicas de los países de la unión, tendrá lugar en marzo. De allí saldrá el mapa de infraestructuras definitivo, que estará cerrado durante el segundo semestre de 2010. "Esa reunión es para consolidar los planes y para trasladar a la ciudadanía que por parte del gobierno hay una preocupación por la Travesía y por el conjunto de los ejes europeos", comentó.

"La Travesía Central está incluida como proyecto prioritario. Entre Francia y España estamos de acuerdo en que tiene que pasar por ahí, lo que está sin definir es por dónde exactamente", explicó ayer a este periódico en el mismo acto en el que Iglesias y Trémège hablaron públicamente del tema, y al que asistió como oscense. Precisamente es la definición del proyecto y su recorrido, del que se ha hablado tanto, el avance que se podría producir.

El secretario de Estado de Infraestructuras apuntó que en este encuentro se ratificarán como ejes prioritarios el del Mediterráneo, la Travesía Central y otro que va por Galicia. Sin embargo, en respuesta a la polémica que se ha generado por el avance del eje del Mediterráneo frente a la Travesía Central, apuntó que "el corredor mediterráneo es perfectamente compatible", al igual que aseguró recientemente el Ministro de Fomento, José Blanco.

Este último también echó la culpa a Francia por no tener tanto interés en el proyecto, algo que se lleva años escuchando y que reiteró ayer el presidente de Aragón, Marcelino Iglesias. "El alcalde (de Tarbes) ha hecho referencia a que tenemos problemas bloqueados que nos gustaría a nosotros que fueran más rápidos, y por eso estamos trabajando todos los días", admitió en referencia a la Travesía Central. Pero resaltó el trabajo del secretario de Estado Víctor Morlán en este sentido y que se aprovechará la reunión de marzo en la presidencia de España en la UE "para transmitir a nuestros vecinos y al conjunto de autoridades políticas europeas nuestra preocupación por las comunicaciones por el Pirineo central. "Estoy convencido de que el próximo año, que es la presidencia española de la UE, daremos un impulso muy grande a estos proyectos", apuntó.

"Será una ocasión magnífica -insistió- para dar un impulso importante a esas comunicaciones que son vitales para nosotros, pero también para nuestros amigos los franceses", comentó, ya que se se acercarían ambos territorios. Y le devolvió el guante al alcalde de Tarbes al trasmitirle que sabe que cuenta con su apoyo y con la mediación que pueda hacer con otras autoridades francesas.

Iglesias resaltó que ya existe una buena colaboración entre las regiones del ambos lados de los Pirineos en el ámbito de las infraestructuras, y que así se ha demostrado con el Consorcio del Túnel de Bielsa, que se ha mantenido limpio todo el año para evitar su cierre. "Este convenio ha funcionado bien pero tenemos que ser más ambiciosos y ese es el propósito que ya le ha trasmitido al presidente del Gobierno para la presidencia de turno en Europa", aseguró.

Sin embargo, ni el alcalde de Tarbes (quizá porque la línea no afecta a su ciudad) ni el presidente Iglesias ni el secretario de Estado Morlán hicieron referencia a la reapertura del Canfranc.