El Hospital Militar está en pleno proceso de colocar dos prótesis en sus brazos a una chica de Mali de 15 años, que llegó el pasado martes día 18 con un avión del Ministerio de Defensa a la Base Aérea de Zaragoza. La menor ya tienen unas familia de acogida en la capital aragonesa y este jueves también fue escolarizada en un colegio para estudiar 4º de ESO.

Esta operación, que se realizará en las próximas semanas, convertirá a Djitaba (ya le conocen ‘Djiba’ entre el personal médico) en la segunda menor de su país que ha sido atendida en el centro hospitalario zaragozano, después de que un equipo médico de militares españoles de la misión europea EUTEM-Mali detectara sus necesidades en su país.

En abril de 2022, Defensa ya decidió trasladar al pequeñó Basidiki, de 4 años, que sufría una deformación en la cara causada por un tumor cerebral y una neurofribromatosis, cuyos efectos fueron paralizados por la atención médica recibida en el año trascurrido en el departamento de Oncología del Hospital Miguel Servet. De hecho, Basidiki reside con otra familia de acogida en Zaragoza y celebrarán su quinto cumpleaños el próximo 5 de mayo.

Francisco Jiménez

Fuentes próximas a Djitaba señalaron que la joven habla un francés perfecto, lengua oficial en su país, y también se expresa en bambara, el dialecto más hablado. Suele utilizar los muñones de los brazos para comer y los pies para escribir.

Está previsto que pueda ser atendida por fisioterapias en el Servicio de Rehabilitación del Hospital Militar durante medio año antes de que se le pueda colocar la prótesis bilateral. Este departamento ha aumentado su plantilla con una médico y dos fisios, que ya son seis, por los efectos de la llegada de los 24 heridos de guerra ucranianos.

Malformación congénita 

La discapacidad de Djitaba tiene su origen en una malformación congénita. Cuando el equipo médico de los militares españoles en la misión destacada en su país la conoció plantearon la posibilidad de atenderla en España y el Ministerio de Defensa aceptó, igual que ocurrió con su paisano el año pasado y los 53 militares ucranianos.

El Hospital Militar dispone de una habitación logística para que esta joven reciba rehabilitación diaria, aunque ella reside ya con su familia de acogida y tiene una vida normal en Zaragoza, ya ha visitado zonas como Puerto Venecia.

De hecho, fue invitada al concierto que dieron 50 músicos pertenecientes a la Academia General Militar y la Banda del Ejército de Estados Unidos para Europa y África (USAREUR-AF) en el Casino Mercantil el pasado viernes. Pudo acudir junto a heridos ucranianos y los militares del centro. Algunos compañeros la grabaron y en las imágenes se la puede ver bastante animada con la música.

Al atenderla durante los primeros diez días se le ha valorado la posibilidad de colocarle las prótesis, y parece que ha recibido buenas noticias para que pueda tener brazos. La comparan con Irene Villa, una víctima de ETA que sufrió las consecuencias de un atentado con 12 años en 1991, perdió las piernas cuando iba camino del colegio, con su madre, y se las colocaron con sendas prótesis.

En la recuperación de Djitaba, que supone una apuesta del Gobierno español en un país donde realizar actuación de ayuda humanitaria, hay colaboración entre el Ministerio de Defensa, que se ocupa de su tratamiento fisioterapeútico, y el Gobierno de Aragón, que asume la financiación de las prótesis.

Traslado de cinco militares ucranianos 

Por otro lado, fuentes militares señalaron que el próximo domingo serán trasladados cinco militares heridos ucranianos a su país de los 24 que hay actualmente en el Hospital Militar. Son ya 53 los que han pasado por el Militar desde que empezó la guerra el 24 de febrero de 2022.