Los barrios de Zaragoza han vuelto a alzar la voz en la Cincomarzada, la fiesta reivindicativa por excelencia, y han trasladado sus principales demandas ciudadanas en una mañana en la que el sol ha acompañado los actos organizados en el Parque Tío Jorge.

La plaza del Pilar ha sido el punto de salida de la Marcha de los Barrios, que ha recorrido el puente de Piedra, la calle de Sixto Celorrio y la plaza de San Gregorio hasta llegar al parque. Durante el trayecto, los voluntarios vecinales han portado pequeñas pancartas con reivindicaciones, "muchas de ellas históricas". La marcha ha estado amenizada por los Gaiteros del Rabal y los Bucardos y por cuarenta cabezudos de diferentes comparsas zaragozanas. 

El presidente de la Federación de Asociaciones de Barrios de Zaragoza (FABZ), Manuel Arnal, ha puesto voz a todas las peticiones durante la lectura de un manifiesto, bajo el lema 'Somos barrio', y, al finalizar, ha entregado a la vicealcaldesa Sara Fernández, que ha participado acompañada por el concejal de Participación, Javier Rodrigo, y por Lola Ranera, portavoz municipal socialista y Presidenta del Distrito del Rabal.

Arnal ha recordado que este año se cumple el 45 aniversario de la Cincomarzada y ha recordado que "la situación actual requiere hacer un gran esfuerzo inversor, sobre todo en las zonas de la ciudad más degradadas urbanísticamente y socialmente, en donde el impulso en lo social se vea acompañado de proyectos que se ejecuten realmente y no se queden en el papel presupuestario". Tal y como ha trasladado, "es hora de hacer la inversión con criterios de renta y de población y envejecimiento". Entre las peticiones de los barrios, por citar algunas, se encontraba la construcción de un nuevo hospital en la Margen Izquierda, la finalización integral de la avenida de Cataluña, un centro cívico en Parque Goya, una actuación en el barrio Pignatelli, viviendas municipales en régimen de alquiler en la antigua Alumalsa o la mejora de movilidad del barrio de Santa Isabel. "Son reivindicaciones de la ciudad que son asumibles y es la hora de ejecutarlas", ha concretado.

Al finalizar el acto se ha querido homenajear a Juan José Jordá, histórico líder vecinal del Picarral, que falleció hace unos días, con la entrega de una placa que ha recogido su viuda, Teresa, acompañada por familiares. También se ha reconocido la labor de Emilia Panadero, de la asociación Parque Bruil, y de Ángel Gómez, de Montemolín, así como el trabajo desempeñado por Javier Ramírez, empleado jubilado de Zaragoza Cultural.

Un amplio dispositivo sanitario

En el Parque Tío Jorge se ha establecido un amplio dispositivo de vigilancia, con la Policía Local, un retén de Bomberos y voluntarios de Protección Civil. El Ayuntamiento, además, ha instalado un Punto Violeta junto a la zona de la Cruz Roja para fomentar una fiesta libre de agresiones sexistas y prestar ayuda en caso de que se produjera cualquier violencia contra las mujeres.

Cruz Roja ha movilizado hasta a 60 personas, en dos turnos, para atender cualquier emergencia sanitaria que se pudiera producir a lo largo del día. La doctora Helena Benito, voluntaria y responsable del dispositivo, explica que ella estará durante toda la jornada, junto a tres coordinadores. Entre el personal desplazado al parque hay dos médicos y dos enfermeros. 

El trabajo de montaje ha empezado temprano, en torno a las 7.00, y está previsto que estén allí hasta las 20.00. A las 12.00 de este viernes habían atendido a tres personas, con pequeños cortes provocados con las labores de preparación del almuerzo. Se ha instalado un hospital de campaña, un puesto de atención fijo de primeros auxilios, dos ambulancias de Soporte Vital Básico, una uvi móvil, tres vehículos de transporte y se cuenta con equipos de socorristas.

Por la tarde, repartirán hasta 300 alcoholímetros y unos 800 preservativos, así como folletos informativos. El año pasado, según recordaron, la fiesta se desarrolló sin especiales incidentes, y atendieron a cinco personas.