El Gobierno aragonés y la Cámara de Comercio unen sus fuerzas para reclamar una zona franca en Zaragoza

Lambán anuncia que solicitarán formalmente al Ministerio de Hacienda el acceso a los "privilegios" que implica disponer de ella.  

Una plataforma, con capacidad para 14.000 kilos, eleva la mercancía hasta la bodega principal del Jumbo de Korean Air. La carga y descarga de un aparato de este tamaño se alarga más de hora y media gracias a la pericia del personal de las compañías de handling de Groundforce y Swissport.
Tráfico de mercancías en Zaragoza.
Heraldo

El Gobierno de Aragón y la Cámara de Comercio de Zaragoza dan un paso adelante en su objetivo de que Zaragoza disponga de una zona franca. Javier Lambán acaba de anunciar que van a solicitar al Gobierno de manera formal que dé un impulso al proyecto. El interés en la Comunidad por este proyecto viene de lejos. Ya en diciembre de 2019, y a raíz de un estudio publicado en la revista Economía Economía de Ibercaja, la Consejería de Economía manifestó su interés por poder habilitar una zona franca, una decisión que depende del plácet del Ministerio de Hacienda. A ese proyecto se ha referido este jueves Lambán, que ha confirmado su intención de pedir las "ventajas tributarias" que lleva aparejadas. "Hemos pasado toda la historia sin mar", ha ironizado, recordando la dificultad que implica la concesión a una ciudad sin puerto. Aunque Sevilla cuenta con ella.  Y ha expresado, en unas jornadas de El País, que es "una lástima" que la decisión no dependa directamente de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, que ha detallado las inversiones que su departamento prevé impulsar en Aragón. 

La intención del Ejecutivo autonómico siempre ha sido que la zona franca permita poner en valor el Aeropuerto de Zaragoza, e incluso recuperar el viejo proyecto de tiempos del presidente Marcelino Iglesias, que consistía en reforzar la intermodalidad mediante la implantación de una estación del AVE. "Eso significaría convertir el aeropuerto en una solución para la saturación difícilmente superable de los aeropuertos de Barcelona y de Madrid. Además, recibiríamos con los brazos abiertos las inversiones que pudieran llegar", señala hace unos meses el presidente de Aragón en una entrevista en HERALDO.

Una zona franca implica ventajas aduaneras y tributarias para las empresas y para el intercambio de mercancías. Es un proyecto que beneficia a la capital aragonesa, porque permite sacar el máximo provecho a su estratégica ubicación, con una plataforma logística, Plaza, en auge y con unos resultados en transporte aéreo de carga que sitúan el complejo aeroportuario de Zaragoza en el segundo o tercero mejor del país. En la actualidad disponen de zonas francas Vigo, Santander, Bilbao, Sevilla, Cádiz, Santa Cruz de Tenerife y Las Palmas.

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